Zapatos forales

«¡Aupa David! ¿Qué tal andas? Oye... que vamos en el coche a eso de las tiendas baratas de Arnedo. ¿Te vienes a comer?», me espetaron en tono jocoso.

'Las tiendas baratas de Arnedo'... Yo me preocupé por esas palabras, que tengo un máster en toponimia riojana y les dije: «Vamos a ver, navarros de mi alma, una cosa clara para que la grabéis a fuego. NUNCA llaméis a ese centro de ocio del consumo 'Lugar tiendas baratas de Arnedo'. Son Outlet. ¡Outlet!»

Ellos se reían de mis palabras mientras sonaba en el coche a todo volumen Piperrak: «Que sí... que vale, que lo que tu digas... Que bajamos a ese sitio que venden ropa y zapatos a buen precio. Que Ander el otro día pilló unas chirucas chulas baraticas para pasear y un par de cortavientos azules. Y queremos probar suerte. ¿Te vienes?»

He de decir que mis amigos son muy básicos. Son los típicos navarros de esos que creen que un par de botas de monte es lo mejor para ir a tomar unos potes a la Estafeta o a la Laurel si han decidido venir a visitarme.

Las chirucas o botas de monte son un calzado muy de la gente del otro lado del Ebro. Los vascos también son fan de ellas. De las chirucas y de las tierras navarras y riojanas (pero eso es otra historia).

El calzado como identidad fabricado por vosotros. Habéis ayudado con vuestra industria a crear moda de paseo foral. Ya lo dicen muchos estudios de esos que rellenan páginas de internet. Dime qué calzado llevas y te diré como eres.

Por eso, riojanos míos, una de la manera más fácil de localizarnos en vuestros bares es por el calzado. Además de movernos en grupo cerrado ocupando la barra, nuestros pies dicen mucho. Mirad siempre hacia abajo. Por nuestros zapatos nos reconoceréis.