Ayuntamiento y Gobierno regional solicitan a Fomento renegociar el convenio del soterramiento

Gamarra y Cuevas han adelantado que Ayuntamiento y Gobierno regional pedirán este viernes en Madrid una renegociación del convenio inicial que conlleve mayor 'protagonismo' de la Administración General del Estado «como se está haciendo en otras ciudades de España», dentro de la reunión del Consejo de Administración de la sociedad de integración LIF 2002 que se celebrará a petición de ambas administraciones.

Los 'socios locales' entienden que, a punto de finalizar la primera fase, «los gastos estimados hace casi 20 años no se ajustan a la realidad actual, considerando además que se establecieron sobre estudios previos no sobre los proyectos constructivos, con normativas menos exigentes, con una valoración de los terrenos de entonces (crisis económica de por medio) y sin contemplar el instrumento de gestión que ahora es LIF«.

«Ha llegado el momento en que Fomento debe abonar los 30 millones que le corresponden por el convenio fundacional y que asuma los activos de los que ya está disfrutando pero siguen siendo financiados por el conjunto de los socios», han aclarado. «Se trata», en definitiva, «de actualizar las aportaciones al momento actual» cuando han pasado «casi 20 años» y han cambiado «muchas cosas».

«Logroño ha hecho bien el trabajo, está a punto de finalizar la fase I y además quiere encarar las siguientes cumpliendo el compromiso con todos los vecinos, pero el posible déficit de la II y la III (estimadas inicialmente en unos 75 millones) en ningún caso puede recaer sobre los socios locales sino que Fomento tiene que asumir un mayor protagonismo como tiene en otros soterramientos... No puede ser que las administraciones más débiles asuman más que, en este caso, la fuerte«, han coincidido alcaldesa y consejero.

Si bien en la fase I no existe déficit como tal (ya que los tres socios asumieron la financiación de las obras realizadas a través de un préstamo sindicado de 220 millones con unas cuotas que se abonan semestralmente -en julio, Ayuntamiento y Comunidad habrán amortizado 28 millones de euros cada uno, a los que se suman los correspondientes al Gobierno de España-), dos de las tres partes pondrán ahora sobre la mesa una serie de reclamaciones «a fin de aligerar estas cargas para Logroño y La Rioja», que se estiman en una devolución pendiente de alrededor de 120 millones.

En primer lugar, el cumplimiento del convenio fundacional. En él aparecía el compromiso de que Fomento aportara 30 millones de euros -en concepto señalado como llegada de la Alta Velocidad-, «una cantidad que aún no ha hecho efectiva (sólo han llegado 6 millones) y que de hacerlo aliviaría mucho la carga financiera del conjunto de la sociedad al amortiguar los costes». Una exigencia, cabe recordar, que anteriormente reclamaba el PSOE cuando gobernaba Mariano Rajoy.

Después, el tratamiento de los activos cedidos. Fomento -a través de su gestor de infraestructuras ADIF- disfruta ya de una serie de activos (la propia infraestructura ferroviaria totalmente renovada, el edificio de la estación de trenes que permite no solo la prestación del servicio sino la explotación de locales...) «cuya financiación aún sigue siendo soportada por el conjunto de la sociedad».

Y, por último, la refinanciación del préstamo. Las administraciones territoriales consideran que «vienen haciendo un esfuerzo desmesurado en la financiación de las obras del soterramiento» y consideran viable que se refinancie el préstamo que va dando soporte a la fase I, «para lo que la postura que adopte el Ministerio resulta fundamental».