El repunte del covid ha provocado una treintena de ingresos en dos semanas

El radar regional, integrado en la red de vigilancia centinela de infecciones respiratorias –covid, gripe y virus sincitial–, está alerta y los datos del último informe (a fecha 10 de septiembre) remitido a la Dirección General de Salud Pública son elocuentes: la transmisión va al alza. A lo largo de la semana pasada se notificaron 187 casos –123 de pacientes mayores de 60 años y 110 de ellos de más de 65– frente a los 159 y 117 de las dos anteriores. Desde el 30 de agosto la cifra de positivos asciende a 311 frente a los 197 en ese mismo periodo en 2022.

En lo que llevamos de verano, desde el 1 de julio pasado, el número de infectados confirmados es de 826. Incluidos los afectados por seis brotes en centros sociosanitarios. Con mayoría femenina –495 mujeres frente a 331 hombres– el impacto es más evidente en las cohortes de edad superiores: solo se han diagnosticado 31 casos en niños (0-9 años) y 14 en adolescentes (10-19 años) mientras el grueso eran mayores de 60 años, 545 (65,98%), de los que 400 superaban los 70 años, 260 los 80 y otros 92 los 90.

«Sí, en las últimas semanas ha aumentado la transmisión del covid, aunque también es verdad que previamente estábamos en niveles muy bajos. El factor más importante que ha contribuido a este repunte puede ser la mayor movilidad de la gente en estas últimas semanas y también los cambios relacionados con la evolución genética del virus, ya que los nuevos sublinajes que van a apareciendo, que siguen siendo de la variante ómicron, parece que tienen mayor transmisibilidad, lo que no quiere decir que esté incrementándose la gravedad, porque, de hecho, no se ha observado», resume Eva Martínez Ochoa, directora general de Salud Pública.

De hecho, en todo el verano no ha habido ingreso alguno en la Unidad de Críticos, ya que el último paciente con covid atendido en la UCI entró el 12 de junio y el servicio está 'limpio' desde el 9 de julio. Sin embargo, el repunte de la enfermedad sí ha provocado en las dos últimas semanas un alza en las hospitalizaciones, 31 desde el 30 de agosto. En la actualidad permanecen 15 enfermos en planta (hace justo un año era 10, uno de ellos en la UCI).

«Al haber más casos, efectivamente ha habido también un mayor número de ingresos hospitalarios, con pacientes de edad muy avanzada y con patologías previas», incide la directora general, quien detalla que desde el 1 de julio las hospitalizaciones han sido 88 (48 mujeres y 40 hombres). De ellos solo 2 niños y un joven de entre 10 y 19 años. La mayoría, de más de 60 años, 81 (92,04%), 73 de ellos de más de 70 años, 51 mayores de 80 y 24 con 90 o más.

La edad avanzada y las patologías previas también son el eje clave en la estadística más dramática, la de las víctimas mortales. En las dos últimas semanas se han registrado 3 fallecimientos –30 de agosto, 1 y 2 de septiembre– que elevan a 5 las muertes en verano, a 19 las de este 2023 y a 981 las totales. El año pasado a estas alturas los decesos ascendían a 100, de los que 22 se produjeron entre el 1 de julio y el 10 de septiembre.

Con el actual diagnóstico en la mano, en vísperas del inicio de las fiestas de San Mateo y «sin alarmismos», Eva Martínez Ochoa incide en los consejos ya conocidos de «prudencia, responsabilidad y sentido común y, en caso de aparición de síntomas, uso de la mascarilla y protección a los más vulnerables».

Su departamento ultima, además, los flecos de la inminente campaña de vacunación otoñal, en la que desde la primera semana de octubre se empezará a administrar la protección frente al virus de la gripe y la de refuerzo del covid para los mayores de 60 años y a las personas de riesgo. «Posiblemente empezaremos en las residencias de mayores», avanza Eva Martínez Ochoa, que insiste en hacer un llamamiento: «La vacuna está indicada en las personas que tienen más riesgo de sufrir complicaciones si padecen la enfermedad y, por lo tanto, el consejo es, evidentemente, el de vacunarse».