El móvil no te va a durar dos años

Casi todo el mundo tiene un móvil. En España, nueve de cada diez personas. Y 7 de cada diez tienen un móvil «inteligente», un smartphone. Pocos productos pueden presumir de una penetración así: desde que Apple anunció el iPhone han pasado sólo 9 años, y ya un 70% de los consumidores posee un dispositivo de la gama que comenzó la empresa de la manzana.

Lo curioso es que los teléfonos móviles no nos duran mucho. Aunque su vida útil es, en teoría, mucho mayor, un móvil dura en el bolsillo de un consumidor español una media de 20 meses. Algo más de año y medio.

Los datos son de una de las mayores consultoras de consumo del mundo, Kantar Worldpanel. El estudio, realizado a nivel mundial, muestra que los españoles no somos en realidad muy raros. A los estadounidenses les dura un poco más (21,6 meses) y a los alemanes algo menos (18,8) pero la media europea anda muy cerca de la española. Los más dados a renovar el móvil, curiosamente, son los italianos (17,7 meses). Siempre atentos a la moda, se diría.

Que la rotación de los móviles sea así (y antes lo era más, porque ahora nos duran casi tres meses más que hace dos años) contrasta con la más que arraigada costumbre que tenemos los españoles de adquirir los terminales acudiendo a las ofertas de financiación de las telefónicas, ya sea al cambiar de operadora o dentro de los planes de precios de la compañía en la que estamos.

En los últimos tiempos se ha establecido ya como costumbre financiar el smartphone a un plazo de 24 meses. Se da, pues, la curiosa paradoja de que un considerable porcentaje de los consumidores financien el móvil para pagar cuotas durante un plazo mayor que la esperanza que tienen de mantener el aparato en el bolsillo. Además, no se trata de una inversión barata. Los españoles, según Kantar, gastamos 276 euros de media en la adquisición del terminal.

Como ocurre en demasiadas ocasiones, los consumidores no terminamos de ser racionales cuando de adquirir un teléfono se trata. Tendemos a comprar aparatos más potentes de lo que necesitamos y los financiamos porque así nos «duele» menos el precio, muchas veces alto, del terminal que estamos comprando.

Unas preguntas

Así las cosas, hay algunas preguntas que conviene hacerse antes de comprar un móvil.

Vale, es el móvil más chulo, pero... ¿Voy a grabar vídeo en 4K, o a usar juegos en 3D que necesiten tanto procesador? ¿Necesito 64 gigas de tarjeta? Si la respuesta es no, probablemente un 'clase media' sea más que suficiente... y valen la mitad. En el segmento entre 150 y 300 euros hay muchos aparatos que llegarán a las necesidades del 99% de los consumidores. ¿De verdad necesita un móvil de 800 euros?

A todos nos ha pasado. No era el móvil que más queríamos, pero justo en la tienda no estaba, y por no esperar un par de días, he acabado con éste, que era un poco más caro...

Las generaciones de teléfonos móviles se suceden con una frecuencia de meses. No vas a durar mucho a la última, así que plantéate mirar el penúltimo móvil. Puedes encontrar descuentos muy jugosos.

Si vas a financiarlo con una operadora, suma: todas las cuotas que deberás pagar, y también, ojo, la diferencia de precio, si la hay, con una tarifa con las mismas características pero sin el terminal aparejado.

No, no es la misma pregunta. Una vez que sepas cuánto te cuesta el móvil financiado en los 24 meses, investiga en internet y busca ese mismo terminal libre. Casi todos los fabricantes tienen su propias tiendas, pero si no siempre está las socorridas Amazon, Redcoon... hay muchas posibilidades de que te lleves una sorpresa.