El duro adiós de Sergio Parla

Precisamente mañana se cumplirán dos inviernos que Sergio Parla llegó a Calahorra, procedente del Móstoles y con experiencia pese a su juventud también en Segunda B, con el Rayo Majadahonda y el Rayo Vallecano B. No llamó tanto la atención en sus primeros meses como rojillo, si bien disputó 14 partidos en Tercera y fue titular en los dos de la fase de ascenso. Un importante refuerzo actuando especialmente en el centro de la zaga, no en la medular como hizo en Segunda B.

Parla fue protagonista de uno de los mejores momentos de la historia del Calahorra y continuó siéndolo, con más fuerza si cabe, en la categoría de bronce. Ayer, el madrileño comunicaba su decisión de dejar el club: «Estos días han sido difíciles para mí, he hecho todo lo posible por estar bien pero la decisión que he tomado es que me vuelvo a casa. Soy incapaz de continuar». Parla fue convocado el pasado sábado por Miguel Sola y estuvo presente en el banquillo de Urritxe, pero no llegó a jugar.

Deportivamente, Sergio Parla ha sido uno de los futbolistas clave en la reciente trayectoria rojilla. El pasado año disputó 33 partidos en liga, anotando ocho goles, mientras que en la presente campaña ha jugado 15 encuentros y marcado dos tantos. Su entrega y carácter en el mediocentro eran seña de identidad, descubriéndose además como un jugador con llegada e imaginación. Cualidades que hicieron que otros equipos de Segunda B se interesasen por él. Además, no sólo dentro del campo era una referencia sino fuera de él, convertido en uno de los referentes del club y ganándose el cariño de la afición y de sus vecinos de Calahorra.

Grandes momentos

«Llegué en un momento difícil deportivamente y lo vivido aquí me ha hecho recuperar la ilusión por el fútbol. Los momentos del día del ascenso serán inolvidables», comentaba Parla en su despedida. Muchas imágenes que protagonizó se quedan en la memoria colectiva rojilla, como su penalti anotado ante el Atlético Levante en aquella mágica tanda en Buñol, su nariz rota en Sant Andreu con la que aguantó todo el partido o sus goles en La Planilla que abrieron tanto la temporada 2018/19 como la presente. En su despedida, Sergio Parla dejaba una puerta abierta al futuro:«Ojalá en un futuro pueda volver a estar aquí vistiendo la camiseta rojilla».

Por su parte, Eduardo Arévalo, director deportivo del Calahorra, quiso «darle las gracias por toda la dedicación que ha tenido y lo que nos ha ayudado a seguir creciendo deportivamente e institucionalmente». Además del factor humano y de que el Calahorra pierde a uno de sus referentes, en el aspecto deportivo el club rojillo deberá ahora moverse en el mercado para encontrar un nuevo fichaje en la posición de mediocentro.