Fernando Magaldi arranca otro reto imposible
El atleta más solidario recorrerá 1.010 kilómetros por pueblos de La Rioja en quince días para visibilizar a las personas con discapacidad
Este viernes es el día. Después de muchos meses de preparación, física, mental y logística, Fernando Magaldi dará comienzo al reto Correr por los que no pueden 1.010 kilómetros y por las personas con dispacidad. Sobre las 6.00 horas saldrá de Arrúbal dirección a Briones.Será la primera etapa de las dieciséis que tiene previsto completar hasta el 27 de julio y que sumarán 1.010 kilómetros. Un reto altruista, que busca dar visibilidad a las enfermedades raras para que se abran o refuercen vías de investigación y, por supuesto, que persigue recaudar el dinero para que ese trabajo tenga más medios.
«Mi reto no es recaudar dinero, sino dar a conocer las enfermedades raras», decía el atleta el 7 de julio del 2022, cuando comenzó dibujar un calendario de actuaciones deportivas con un fin muy concreto. El 19 de julio comenzaba su primer desafío: unir Logroño y Quintana de Toranzo (Cantabria), dos de sus casas. 218 kilómetros de recorrido que completó en cuatro etapas.
El 19 de julio no fue el desencadenante, sino la consecuencia. «Un familiar lo pasó muy mal. Pensábamos que era muy difícil que viviera, pero gracias a la medicina salió adelante. Y como tengo la boca muy grande me dije a mi mismo: si todo acaba bien voy a unir corriendo Logroño y mi pueblo», relata. Era la Navidad del año 2021. Aquellos cuatro días de un caluroso mes de julio dio a conocer el síndrome de Dravet, enfermedad que afecta a niños que no han cumplido el año de vida.
Dos años después, Magaldi está ante al mayor reto deportivo de su vida, al menos por números. Dieciséis etapas y 1.010 kilómetros que han logrado unir a muchos pueblos de la geografía riojana y no solo a través de su zancadas sino desde la solidaridad. Los más implicados han hecho posible que ya se hayan recaudado 35.000 euros merced a las 3.500 camisetas que han comprado, amén de otras actividades generadas a aumentar la bolsa. Cada uno de ellos donará ese capital al fin que estime oportuno.
«Fernando está llevando a cabo una idea muy bonita y de mucho trabajo, pero en ocasiones te topas con que te falta visibilidad. Necesita que le echemos una mano... y para eso estamos, para ayudar», decía Kilian Jornet el 31 de diciembre del 2022. Y Magaldi ya no paró. Después de unir La Rioja y Cantabria se pasó un día dando vueltas a un circuito que trazo en el parque del Ebro de 3,2 kilómetros. Dio treinta vueltas en la Nochevieja del 2022 y logró involucrar a Miguel Heras, uno de los nombres importantes del trail. La excusa fue dar a conocer la esclerosis múltiple.
El atleta inicia estas dieciséis etapas después de haber corrido en Villamediana, de haber unido Ribafrecha y Ezcaray (150 kilómetros), de viajar hasta Cebolais de Cima (Portugal)o Baza para dar a conocer un poco más los síndromes de Piedepon y West, de comenzar a correr en Poncebos (Asturias) y llegar a Miranda de Ebro en estrecha colaboración con la Asociación de Salud Mental de La Rioja,... y se podrían escribir sobre muchos más. El 13 de mayo del 2023 también aprendió que la montaña es peligrosa. «Pasé miedo, mucho miedo», admitía tras unir, como pudo Ribafrecha y Ezcaray. La climatología cambiante y la noche le atraparon, pero aún así logró recaudar el dinero suficiente como para dar de comer a todos los niños de la aldea keniana de Turkana durante un años través de la Ong ONG Amor Sin Barreras.
Kilómetros, asfalto y calor
La etapa entre Arrúbal y Briones abre el desafío. El guión está definido. Magaldi comenzará a dar las primeras zancadas en torno a las seis de la mañana para concluir el recorrido entre las dos y las tres de la tarde. Quiere evitar las horas de más calor, aunque es indudable que el sol será uno de sus más fieles acompañantes. El sol y el asfalto, pues todos los kilómetros prácticamente serán sobre esta superficie. Las temperaturas superarán los 30º centigrados todos los días, aunque la previsión le depara alguna mañana fresca.
El epicentro de esos 1.010 kilómetros está en el entorno de Logroño y La Rioja Alta, aunque no se olvida de La Rioja Baja. Tras el primer día, el segundo amanecerá en Islallana para llegar hasta Baños de Río Tobía. La localidad chacinera le vera pasar en más de una jornada. En la tercera, irá desde Cenicero hasta Foncea, recorriendo muchos pueblos cercanos a la A-12, la autovía del Camino. En la cuarta etapa, el 15 de julio partirá desde Logroño para llegar a la Villa de Ocón. Por esas tierras transitará también en la sexta etapa, con llegada en Alcanadre y en la decimoquinta, con inicio de nuevo en Logroño y llegada en Autol.
Entre todos los pueblos por los que pasará, Arrúbal es origen y final. Siempre ha estado ahí. Inicio y último metro del reto, el 27 de julio después de esos 1.010 kilómetros. En busca de la montaña, en la que vivió de niño pero en Cantabria, peregrinará por Ezcaray, Viniegra, Canales, Mansilla o Anguiano. Serán etapas exigentes, no ya por el sol, sino también porque el cansancio irá acumulándose y porque la carretera pica hacia arriba.
Su cuerpo está castigado, pero su mente fuerte. No solo por el reto, que es lo más importante en este momento, sino porque también el pasado fin de semana se proclamó subcampeón de España de Ultratrail Máster 60. Nacional,Europeo y Mundial son sus otros sueños, aunque ahora no son su prioridad. «Desde que corro con este fin soy mejor persona», sentencia.
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