Una noche que recuerda a los mejores tiempos

Es que llenar el pabellón logroñés era bastante habitual para el Ciudad de Logroño con algunas fechas señaladas en la que se colgó el cartel de 'No hay billetes'. Pese a que no existan datos oficiales del número de entradas expedidas para estos partidos, las crónicas de entonces traen a la memoria el aluvión de aficionados que acudían a los partidos de los franjivino, especialmente los europeos o la Copa del Rey que organizó el club en mayo del 2013. Algo que se fue olvidando por el descenso de presupuesto del equipo riojano, la marcha del patrocinador principal, la pandemia (que alejó a muchísimos hinchas de los lugares cerrados) y las retransmisiones por plataformas de streaming.

Jornadas como la del domingo se repitieron varias veces en la historia del club, aunque los últimos datos de mayor afluencia se retrotraen a la segunda temporada del equipo franjivino en Champions. Posiblemente frente al Kiel, el 3 de diciembre del 2014, y contra un Paris Saint Germain repleto de estrellas –21 de febrero del 2015– se registraran las mayores afluencias de aficionados a los partidos de los riojanos. Para aquellos partidos, al igual que para la Copa del Rey que organizó el club en mayo del 2013, incluso se utilizaron las grada telescópicas que hay detrás de las porterías. En la actualidad, están estropeadas.

Pero el primer llenazo de balonmano del Palacio de los Deportes se vivió mucho antes, el 6 de mayo del 2006, jornada en la que el Ciudad de Logroño, entonces Darien, logró el ascenso a la Liga Asobal. Fue en un encuentro ante el Aranda que quedó en empate, aunque 20 minutos antes del final se sabía de la derrota del Pozoblanco, lo que hizo delirar a los asistentes.

Posteriormente, la primera visita del Barça (diciembre del 2006), o el debut europeo ante la Estrella Roja serbia (noviembre del 2009) hicieron lucir al pabellón logroñés con sus mejores llenos. Tiempos pasados que hoy la afición franjivina, bastante más delgada que entonces, no se cansa de añorar.