El Ayuntamiento de Haro contrata el proyecto de la nueva ludoteca

El Ayuntamiento de Haro ha contratado el proyecto de la nueva Ludoteca Municipal que se instalará en los dos chalets cedidos, de manera gratuita, por el Gobierno de La Rioja a la ciudad de Haro el pasado mes de febrero. Arancha Ozaeta ha sido la encargada de realizar el proyecto de las nuevas dependencias lúdicas. La arquitecta jarrera ya efectuó el diseño de la nueva zona de juegos del parque Jacinto Benavente-El Mazo.

El proyecto, cuya inversión alcanza los 14.000 euros, recoge varios aspectos relacionados con la actuación que se emprenderá en ambos inmuebles. Por un lado se propone una rehabilitación respetuosa del edificio principal, que hace referencia a las dos antiguas viviendas de maestros sitas en Avda. Juan Carlos I, a la vez que se pretende conservar la imagen unitaria del conjunto de viviendas y asegurar sus condiciones de salubridad, habitabilidad, confort y seguridad.

Además, como destaca el Ayuntamiento de Haro, «una de las razones más importantes por las que estos inmuebles han sido elegidos para relocalizar la Ludoteca Municipal, es la calidad de sus espacios exteriores. Por ello, el proyecto señala, como un aspecto fundamental, la propuesta de integrarlos de modo sustancial en la redefinición espacial del conjunto».

Igualmente, se plantea una pérgola que proteja del sol, cualifique los espacios exteriores y expanda el interior. Será un elemento infraestructural que proveerá de sombra, accesibilidad e instalaciones necesarias para el buen aprovechamiento del jardín. Incluso incorpora un aula de verano que permitirá asimilar las matrículas extraordinarias de los niños que habitan en la ciudad de Haro durante la época estival.

Alguna de las características del proyecto muestra la necesidad de adecuar el interior, y conectar los dos inmuebles en un solo edificio para garantizar una óptima gestión única. También señala que se conservarán los dos accesos para poder diferenciar un acceso público de niños y padres en inmueble número 31, y una entrada privada para las personas al cargo en el número 29. La planta baja estará destinada a infantil y, la primera planta, a primaria. Dicha organización ayudará en la gestión diaria de ambos grupos con la independencia que requieren en términos de horarios y programa.

Desde el punto de vista de los cuidadores se requieren espacios diáfanos con fácil control visual de todas sus áreas. Desde el punto de vista de los niños, se demandan espacios amplios y flexibles, íntimamente relacionados con el jardín exterior. Por ello, se propone la apertura de huecos en muros de carga perpendiculares a fachada que conecten las cuatro crujías del edificio a sur.