«Imagínate qué supone para mí ahora, con 400 euros, pagar 2.400 al Ayuntamiento»
María Desahuciada en el 2013
A. G.
Sábado, 8 de febrero 2014, 01:11
Desgraciadamente, va camino de convertirse en un 'tópico': «A cualquiera le puede pasar». Es lo que dice María, esta logroñesa que regentaba un bar, estaba casada y con unos ingresos familiares superiores a los 4.000 euros hasta hace bien poco: «Me divorcié, el bar se hundió y perdí el trabajo... y ni yo ni mi exmarido pudimos hacer frente a la hipoteca». El matrimonio, ahora disuelto, había comprado en el año 2000 su vivienda en una céntrica calle logroñesa. Pagó 200.000 euros y debía 100.000. El inmueble era atractivo, con lo que el banco aceptó la dación en pago y María se ha quedado sin casa, pero, al menos, sin deuda.
Publicidad
El hecho de que la ejecución hipotecaria haya concluido con una dación, y al no tener más ingresos en toda la unidad familiar que los 426 euros de la renta de inserción, la hacen cumplir con los requisitos de la Ley de Haciendas Locales para que la plusvalía, así como otros cargas de la vivienda (el IBI y las cuotas de la comunidad de vecinos) las asuma el banco. «Todavía no lo sé; en mi caso la plusvalía supone 2.400 euros y no entiendo qué beneficio hay en una vivienda que compré por 200.000 euros y he tenido que 'vender' por 100.000». María agradece en este sentido el asesoramiento de la abogada del Irvi: «El día que firmamos la dación en el notario, el banco pretendía cargarme con el IBI y la Comunidad, pero la abogada, afortunadamente, se dio cuenta». «No es lógico que tengamos que pagar una plusvalía cuando se nos ha arruinado la vida; imagínate lo que suponen para mí ahora esos 2.400 euros».
¡Oferta especial!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión