Los carriles derechos de Gran Vía serán de uso compartido y preferente para ciclistas

La séptima y definitiva fase de la rehabilitación integral del firme de Gran Vía llega con novedades dentro del intento del equipo de Gobierno municipal de 'pacificar' el tráfico en una de las principales vías urbanas de la capital. Así, y tal y como adelantó a Diario LA RIOJA el concejal de Desarrollo Urbano, Pedro Sáez Rojo, los carriles derechos de ambas calzadas pasarán a ser de uso compartido -vehículos y bicicletas- y preferente para ciclistas.

La velocidad quedará reducida a 30 km/h, con prioridad para bicicletas, manteniéndose en los carriles interiores -los izquierdos- los actuales 40 km/h, lo que será debidamente señalizado tanto horizontal como verticalmente poniendo especial énfasis en las intersecciones. «Así como en zonas de nueva creación es posible planificar un carril bici, en el centro entendemos que las bicicletas deben bajar de la acera a la calzada y, tras su introducción en Gran Vía, nuestro compromiso será hacerlo extensible hacia Jorge Vigón y Murrieta creando un eje Este-Oeste de carriles lentos», explicó Sáez Rojo.

Desde el Ayuntamiento, además, ya se trabaja en la revisión de la red de carriles bici para dar continuidad a los actualmente existentes a través de calles peatonales o semipeatonales y las denominadas pacificadas o 'vías 30', aquellas en las que, como en Labradores y Vélez de Guevara, la velocidad permitida no puede exceder de 30 km/h y que podrían ser extensibles «a la mayoría de calles unidireccionales y de un solo carril de circulación».

La pacificación o descongestión del tráfico también conllevaría, aunque más a medio plazo, el traslado de algunas de las líneas del autobús urbano, así como del metropolitano. «Aprovechando la reordenación del transporte público según avance el soterramiento, es más que posible que alguna línea se desplace al sur, desde Gran Vía a Duques de Nájera, y, respecto al metropolitano, estamos en negociaciones con el Gobierno de La Rioja para buscar alternativas», avanzó Sáez Rojo a este periódico.

Del mismo modo, y dentro del conjunto de novedades en la 'futura' Gran Vía, el horario de carga y descarga será modificado ampliándose a las 24 horas del día, si bien solo se permitirá un tiempo máximo de 15 minutos para evitar el actual «abuso» y favorecer un «uso» más reglado. «Y nos vamos a poner serios», avisa el concejal popular en referencia a la Policía Local y no sólo en lo que afecta a conductores sino también a ciclistas.

El 'paquete' de medidas diseñado por el equipo de Gobierno municipal respondería, en parte, a las recomendaciones ya planteadas en su día por Ciesm-Intevía en el informe que ha servido de base al proyecto de rehabilitación actualmente en ejecución: la toma en consideración de restricciones de velocidades, cargas o servicios (carga y descarga) y vehículos pesados para garantizar una mayor durabilidad del pavimento.