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En pleno casco antiguo de Logroño, en la calle Barriocepo, se encuentra una tienda y taller especializado en artesanía y, en concreto, en cerámica. La diseñadora de producto Olga Royo y la ceramista Sandra Pinola abrieron La Plazuela de Barriocepo en 2016. «Consulté con Olga para hacer la web y al final empezamos a hacer cosas juntas», recuerda Sandra. «Nos conocíamos de otro proyecto dedicado a la educación, hicimos amistad y como vimos que hacíamos buen tándem, decidimos continuar juntas», expone Olga.
El coqueto local muestra en primera instancia las creaciones funcionales y de diseño que elaboran las ceramistas artesanas, desde vajilla, pasando por objetos de decoración y complementos, hasta recuerdos. Detrás, en un segundo plano, está el taller en el que imparten clases de alfarería, ya sea con cursos semanales o intensivos, de un par de horas.
Nombre La Plazuela de Barriocepo.
Dirección calle Barriocepo, 47, de Logroño.
Teléfonos 651048577 y 636637852.
Sector artesanía y talleres de cerámica.
Responsables Olga Royo y Sandra Pinola.
«La idea desde el principio era compartir el espacio entre vender lo que nosotras producimos y que nos vieran trabajar, no empezamos con clases. A la gente le gusta vernos trabajar y empezaron a preguntar y cada vez hay más demanda, ahora más que nunca», explica Sandra. Tal es así que ahora al menos el 60% del negocio son los talleres. Por eso han decidido trasladarse después de verano a otro local más amplio.
«Nuestros clientes suelen ser restaurantes o ayuntamientos, que nos localizan fácil por teléfono, así que el lugar no importa tanto, aunque el encanto de este sitio es que está en el Casco Antiguo, en pleno Camino de Santiago, con muchos turistas, pero nuestros clientes habituales nos localizan por teléfono o internet», añade Sandra. No obstante, a pesar de encontrarse en un espacio turístico de la ciudad, su clientela es, sobre todo, local. «Los peregrinos nos tienen casi más como una galería, preguntan si pueden entrar a ver», afirma Olga. Y es que mucho de lo que elabora n y venden es, incluso, personalizado para instituciones o particulares, como murales, trofeos, placas de calles, placas de reconocimiento...
Eso en cuanto a los encargos, pero también ofrecen otro tipo de creaciones. «Hacemos cerámica utilitaria y artística. Lo que hacemos cada una es totalmente diferente, todo lo que tenemos es versátil, aunque cada una tiene su estilo. Lo artístico es más personal y lo utilitario acabas haciéndolo en base a lo que vas vendiendo, tiene diseño pero es menos creativo», describe Olga.
La jarras de gres y las golondrinas son algunos de los objetos más vendidos. De hecho, hay quien les conoce como 'La Tienda de las Golondrinas'. «Antes, en todas las casas, sobre todo en Valencia, las tenían para que los que salían de viaje, como los marineros, regresasen. Mucha gente mayor las reconoce y nos dice: «Yo tenía una de esas en mi casa. Y les tenemos mucho cariño porque el molde es lo primero que hicimos juntas», confiesa Olga.
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Martin Ruiz Egaña y Javier Bienzobas (gráficos)
Juanan Salazar | Logroño
David S. Olabarri y Lidia Carvajal
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