Andreu: «La honestidad es imprescindible y la ejemplaridad es necesaria»

Cuando el boato de las tomas de investidura toca a su fin, llega el momento de la verdad, el de pasara a la acción y empezar a gobernar. Ese momento, para Concha Andreu, que durante casi tres meses ha sido candidata a la presidencia del Ejecutivo regional, ha llegado esta mañana poco antes de las 13 horas. Agostado el protocolo pertinente, toca abandonar la sede del Parlamento, las mesas de negociación, los pactos, los conflictos, los desencuentros... para actuar. Esta tarde se conocerá el cartel completo de quienes le acompañarán en esa responsabilidad.

Esta mañana, Andreu no ha estado sola. La plaza del Parlamento ha cambiado su decoración habitual para convertirse en la gran platea en la que ha recibido su primer gran baño de masas. Cerca de 500 personas, han presenciado su toma de posesión. La mayoría, sentados; muchos detrás de las vallas que separaban a los 'vip' del resto de la ciudad. Entre los 'vip', dos ministros, ambos en funciones: Pedro Duque y Luis Planas. También la presidenta de Navarra, María Chivite, el delegado del Gobierno en el País Vasco, Jesús Loza; el presidente del Parlamento de Navarra, Unai Uhalde; el de las Cortes de Aragón, Javier Sada; la vicepresidenta primera del Senado, Cristina Narbona... Y todas las autoridades, políticas y militares de la región.

Un doble momento histórico. El primero, el punto final a la gestión del PP en La Rioja tras 24 años ininterrumpidos de gobiernos populares; el segundo, el de el aterrizaje de una mujer en la jefatura del gobierno regional. Andreu, esta mañana de azul, ha salido del Parlamento regional escoltada por Jesús María García y el ministro en funciones de Agricultura, Luis Planas antes de que el presidente del Parlamento de La Rioja abriera una sesión plenaria inédita por el escenario y la cantidad de asistentes. Leído el nombramiento firmado por el rey y el presidente del Gobierno central en funciones, Pedro Sanchez, Andreu prometió bajo la formula habitual, «por su conciencia y honor», cumplir con todas las obligaciones inherentes al cargo.

«Me siento muy orgullosa de ser la primera mujer que accede a la presidencia de la Comunidad Autonoma de La Rioja», ha arrancado Andreu después de autocitarse recordando que en su día ya alertó de que «este será el siglo feminista». «Este momento va por todas y para todas las mujeres riojanas», ha dedicado Andreu. Ante ese reto de asumir el gobierno de La Rioja, Andreu, ha vuelto a comprometer las bases de su gestión: «La honestidad es imprescindible y la ejemplaridad es necesaria. Hoy empieza un nuevo tiempo para La Rioja. Un tiempo de igualdad de oportunidades, de igualdad entre hombres y mujeres, de progreso económico y de esperanza y oportunidades para nuestros jóvenes», ha insistido.

En su discurso, Andreu ha defendido la equiparación de La Rioja con el resto de comunidades en el escenario nacional -»La Rioja no quiere ser ni más ni menos que ninguna otra comunidad autónoma», ha dicho- desde un proyecto nacional común: «La Rioja está comprometida con ese proyecto común que se llama España en el que nos reconocemos y al que mostramos nuestra lealtad».

«Estoy convencida de que la unidad en la diversidad de la nación española se vería fortalecida si cultiváramos la convivencia entre españoles. Por eso quiero comprometerme y comprometer a La Rioja en el trabajo por la convivencia. Quiero que nuestra Comunidad sea lugar y símbolo de entendimiento, que San Millán de la Cogolla además de ser un símbolo de la lengua castellana sea un símbolo de convivencia de todas las lenguas españolas», ha insistido Andreu.

En clave más política, ha incidido en que el trabajo que ahora comienza no «será válido si el ejercicio de nuestra actividad política no se asienta en un compromiso ético que le otorgue la credibilidad que necesita». Por eso, como ya reiteró en sede parlamentaria en sus dos sesiones de investidura «la honestidad es imprescindible. La ejemplaridad es necesaria» para «construir más y mejor democracia» y dignificar la maltrecha imagen de la labor política: «Quiero que el ejercicio de la política mejore su estilo y pretendo introducir una cultura política presidida por la responsabilidad y el respeto hacía lo público».

Esa, la honestidad y la ejemplaridad, es la hoja de ruta que se ha marcado la presidenta socialista para «conseguir una sociedad justa» ya que, ha defendido. «ninguna política puede tener éxito si se olvida a las personas. Hoy comienza para La Rioja un nuevo tiempo». Un cambio de ciclo que, auguró, estará marcado por «la igualdad de derechos, de oportunidades, entre mujeres y hombres. Un nuevo tiempo de progreso económico, que devolverá a La Rioja el dinamismo perdido. Un nuevo tiempo de esperanza y oportunidades para nuestros jóvenes, para que no tengan que abandonar su tierra. Un nuevo tiempo para lo público. Un nuevo tiempo para la sostenibilidad y la ecología. Un nuevo tiempo para todas esas cuestiones que tanto la sociedad como los compromisos internacionales demandan».

Y desde el corazón del valle del Ebro, Andreu ha querido fortalecer la importancia que en el escenario futuro debe tener ese eje transversal del país. Por ello, ha puesto sobre la mesa sus dos primeras medidas en forma de propuesta de alianza. La primera, dirigida hacia el Gobierno de España: «Queridos Ministros, nuestra Comunidad es una región competitiva, el Valle del Ebro es un eje económico y estratégico fundamental, y no solo para las Comunidades en él asentadas, sino para España. El crecimiento en la España interior, incluido el demográfico, empieza a dar signos de alarma. España debe de ordenar y distribuir su crecimiento».

La segunda, más próxima, con las regiones vecinas: Aragón, País Vasco, Navarra y Castilla y León. «Si somos capaces de unirnos en lo común y juntar intereses, nuestros objetivos serán más fáciles de alcanzar, ya sea hablando de infraestructuras, de política agroalimentaria, logística o industrial».

La ya presidenta regional ha recordado que los objetivos de todas las regiones deben ser «nacionales y europeos» ya que las estrategias individualizadas «no son lo más eficaz». «En un mundo interdependiente lo inteligente es abrirse a la colaboración para mejorar nuestra fuerza. Estamos aquí Comunidades que compartimos proyectos, objetivos y éxitos, principalmente en el sector agroalimentario, en el científico y el universitario» ha incidido antes de proponer la apertura de «una etapa de colaboración y de alianzas estratégicas».

Antes de cerrar su discurso con una copa de Rioja en la mano y brindar por el futuro de la región, Andreu se ha emocionado al recordar sus orígenes y a su gente más próxima. «Igual que en el Gobierno voy a contar con el mejor equipo, también tengo el mejor equipo dentro de casa. Todos se han sumado a este proyecto. Como si fuera suyo. Han confiado en mí y en mi compromiso. Y hoy quiero agradecerles su paciencia, su aguante, su aceptación y, sobre todo, su apoyo en todo momento».

Por eso se ha comprometido a «hacer mejor a La Rioja. La Rioja referente. La Rioja envidiable en España. La Rioja objetivo del mundo. La Rioja solidaria, justa y cercana. La Rioja innovadora y competente, educada y familiar» algo que intentará hacer siendo «una presidenta de todas y de todos los riojanos».

Andreu, vinculada al agro, lo primero que ha escuchado como presidenta de La Rioja, ha sido a otro hombre de campo. Al menos con responsabilidades en la materia, el ministro de Agricultura, Luis Planas, que le prometió «plena colaboración» desde la «lealtad institucional». «Estamos aquí para resolver problemas reales», ha dicho el ministro recordando los compromisos que se adquieren en los cargos públicos. Sobre la mesa puso Planas problemas compartidos por La Rioja con el conjunto del Estado, entre ellos el reto demográfico e invitó ha hacer reales las potencialidades de la región. «Una España unida es una España que puede dar oportunidades a nuestros jóvenes», ha defendido Planas antes de desear «buen trabajo y suerte» a la presidenta regional.