El Calahorra mide su estado de ánimo

Hace poco más de un año, Diego Martínez se estrenaba como entrenador del Calahorra ante el Izarra en Merkatondoa, en un partido que servía de nueva ilusión para un equipo que, inmerso en una mala racha, pasaba página de la etapa Miguel Sola. Muy diferente es ahora la situación, y es que visto el halo de pesimismo que sobrevuela el entorno rojillo es difícil asimilar que el Calahorra terminó la pasada jornada líder de su grupo, algo inimaginable hace doce meses. Sin embargo, el sentimiento manda sobre la razón y después de unos malos resultados y una imagen decepcionante, el Calahorra evalúa su estado de ánimo en Estella (16.00 horas), con la intención de despejar la mente y marcar un punto de inflexión de cara al final de fase. Además, le toca defender el liderato después del triunfo ayer de la Mutilvera.

Una derrota y un empate en casa en las dos últimas citas marcan la peor racha del Calahorra esta temporada, si bien los resultados de un par de partidos no marcan tendencia. Sí que pueden hacerlo las sensaciones de un equipo con las ideas claras sobre el papel, asumiendo el dominio y el juego ofensivo como líneas maestras, pero que se encuentra atascado sobre el verde, espeso y poco vertical. Lograr una mejoría en el juego y una mayor fluidez de ideas resultará clave para determinar hacia que objetivos se dirigen los rojillos esta temporada.

El pasado domingo, el empate frente a la Mutilvera fue un resumen de esa tendencia, cuando el Calahorra aspiraba a olvidar su segundo derrota del curso de la semana anterior frente al Ebro. Merkatondoa no parece el escenario propicio para la revolución, un campo de hierba artificial en el que solamente el Izarra se siente cómodo.

El conjunto navarro, acostumbrado a sufrir, lo está haciendo también esta temporada, penúltimo actualmente en la clasificación del subgrupo con 11 puntos. Sin embargo, el Izarra ha comenzado a dar pasos al frente en este 2021, con dos victorias ante rivales de entidad, el Ebro y la SD Logroñés, que le han dado un nuevo impulso en la clasificación. Además, el cuadro estellés recibió hace diez días a un nuevo técnico, el joven soriano Javier Martínez, que busca imponer un nuevo aire al equipo y que se estrenó ganando al imbatido equipo logroñés en el Mundial'82.

El Calahorra tendrá que adaptarse a los condicionantes de un partido en el que quizá no pueda asumir ese juego combinativo que acostumbra y deba adaptarse a un estilo más directo en el que no se suele encontrar cómodo. Otra de las dudas será el once, en el que podría apostar Diego Martínez por jugar con dos puntas o por dar continuidad a su esquema de anteriores semanas con una línea de cuatro por delante de un único pivote.

Hacer gol es el objetivo de un equipo que pese a encabezar la tabla es el menos anotador del subgrupo, con solo 7 goles en 12 jornadas. «Es una situación que nos preocupa, que estamos intentado cambiar», apuntaba Diego Martínez esta semana. Sin mejorar la faceta goleadora es difícil cumplir los objetivos y sacar resultados positivos de campos como Merkatondoa, donde el Calahorra llega esta tarde obligado a lograr una victoria que no le baje de la cabeza de la tabla.