Noches de fiesta en el festival Holika de Calahorra, mañanas de recargas

Noches de fiesta y mañanas de café, recargas y compras. Después de estrenar anoche el nuevo escenario Olympus, miles de jóvenes se dejan ver esta mañana por las calles de Calahorra para desayunar y comprar lo básico con lo que pasar el día en la acampada de Holika, además de recargar el móvil.

Este año, además, están de suerte, ya que se pueden evitar la caminata bajo el sol desde el camping a la otra 'central de operaciones' del festival en el casco urbano: el centro comercial ARCCA con Mercadona como reclamo. La superficie comercial ha puesto a disposición de los holikers un tren gratuito para desplazarse hasta este espacio, en el que desde primeras horas de la mañana se pueden ver a jóvenes recargando móviles, comprando bebidas y comida rápida, y descansando en grupo en los pasillos en modo acampada.

El tren se agradece, pero mucho mejor si para pillarlo hubiese una salida directa desde el camping a la parada (en la gasolinera junto al camping). Y es que el rodeo que tiene que dar la chavalería para poder montarse casi les lleva «el mismo tiempo que ir andando», decía esta mañana una joven.

Los jueves de Holika dan también otro aire al mercadillo semanal de Calahorra. «Qué alegría da ver pasar a tanta juventud», aseguraba al ver pasar a las cuadrillas una de las calagurritanas habituales a los puestos de este mercado, en el que en las primeras ediciones de Holika se firmaba un 'sold out' de sillas. Ahora, los chavales, vienen mejor preparados.

Y en las terrazas del Mercadal, otro de los enclaves del festival en el casco urbano, los asiduos comparten espacio con quienes directos del camping buscan una mesa para desayunar con gafas de sol y chanclas. Hay que coger fuerzas porque la tarde-noche se viene épica, con la inauguración del festival con su artista sorpresa y grandes nombres como Ozuna, Omar Courtz y Don Diablo.

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