Regreso al origen de Albelda tras los 1.100 años del monasterio
El Ayuntamiento presenta el proyecto de rehabilitación del scriptorium para poder volver a realizar visitas guiadas
El scriptorium de Albelda de Iregua es un conjunto de cuevas rupestres, similares a Los Palomares de Nalda, situado en el barrio de Arriba. Aquellas cuevas albergaron una escuela de amanuenses (copistas), origen del desaparecido monasterio de San Martín, y este, a su vez, de la propia localidad, propiciando que el trazado original del Camino de Santiago transcurriera por Albelda porque el considerado primer peregrino de la historia, el obispo Godescalco, encargó allí una copia de un manuscrito de San Isidoro de Sevilla en el año 950, cuando peregrinó desde Aquitania para visitar la tumba de Santiago.
A pesar de ser el corazón de Albelda, el scriptorium permanece cerrado al público por su situación de ruina. Las visitas guiadas se suspendieron hace tiempo, precisamente, por el peligro que entraña visitarlas. Recientemente el Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Albelda han firmado un convenio para rehabilitar el scriptorium y convertirlo en un punto de interés turístico. El Ejecutivo regional aportará 330.328 euros para unas obras que próximamente licitará el Consistorio albeldense a fin de mejorar la accesibilidad, desarrollar su museografía e impulsar su dinamización turística.
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«Estos son los vestigios del antiguo monasterio de San Martín, donde hubo una importante escuela de copistas. Las investigaciones de la época dicen que pudo haber hasta 200 monges», explica Sergio Ochagavía, alcalde de Albelda. Pero todo aquello forma parte de un pasado muy remoto. Actualmente el scriptorium más parecen bodegas abandonadas y semiderruidas. «Han ido cambiando de manos, la gente de menos recursos las fue usando para dormir primero y para guardar ganado después. Se conserva parte en estado decente pero hay que estabilizar todo el terreno para dotarlo de seguridad y poder visitarlo», añade Ochagavía.
«Hay que estabilizar todo el terreno para dotarlo de seguridad y poder visitarlo», indica el alcalde, Sergio Ochagavía
El Ayuntamiento albeldense ha adquirido algunas de las cuevas, la Asociación Cultural para la Historia de Albelda otras, también se han donado y cedido algunas de manera que no ha sido hasta ahora cuando se ha podido actuar. «La intención es poder relanzar el scriptorium y volver a hacer visitas guiadas», expone Sergio Ochagavía.
«Poner en alza las raíces»
Ayer el equipo de Gobierno de Albelda presentó el proyecto de rehabilitación, al que Patrimonio ya ha dado el visto bueno, y que desean licitar en breve para iniciar las obras a principios de 2025 y conmemorar así el 1.100 aniversario de la fundación del monasterio de San Martín. «Queremos poner en alza las raíces de nuestro pueblo. Si das valor al scriptorium das valor a la historia del pueblo. Y también así damos importancia al Códice Albeldense no solo para Albelda», destaca María del Bueyo Gómez, teniente de alcalde de Albelda. Y es que en ese códice, copiado allí por el benedictino najerense Vigila entre 883 y 976, aparece la primera representación de los números en Occidente.
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