De fabricar jabón a distribuir luz y hoy, a la energía renovable
La familia Ruiz de la Torre conmemora el 150 aniversario del inicio de su actividad empresarial
Hijo del labrador Juan Indalecio y Manuela Heras, nacido el 23 de mayo de 1850, Santiago Ruiz de la Torre Otaño mostró desde su juventud una capacidad de trabajo y emprendimiento que le llevó a crear un conjunto de empresas que dejaron huella en la ciudad del calzado, de la que fue alcalde y en la que su apellido se mantiene en una calle y como una de sus empresas distribuidoras de energía.
La familia Ruiz de la Torre celebró este fin de semana el inicio de su actividad empresarial hace 150 años. Una inquietud que queda plasmada en 'El legado de un visionario', del escritor Álvaro González.
En el Arnedo agrícola de mediado el XIX no había aún rastro del calzado. Santiago Ruiz de la Torre y Trinidad Solana se casaron el 1 de junio de 1872, fecha que supone la puesta en marcha de sus negocios. Para entonces ya fabricaba jabón en La Riojana, de Gregorio de Irízar. Tras fallecer éste, Santiago continuó el negocio. Amplió su cartera a suministro de nieve. En 1898, contaba con fábricas de cerillas, de cal hidráulica y de aceite. El 7 de noviembre de 1901, Diario LA RIOJA citaba en su portada su genio emprendedor y su entrada en el vino.
Santiago Ruiz de la Torre mostró desde joven gran capacidad de trabajo y emprendimiento y creó un conjunto de empresas
Con la llegada de la electricidad, dio muestras de su visión de futuro. Ante el concurso convocado por el Ayuntamiento en marzo de 1900, se integró junto a otros socios en la Sociedad Anónima Electra de Arnedo para suministrar luz eléctrica a la ciudad y a Quel. En septiembre de 1907, la sociedad planteó su liquidación. Santiago se hizo con las acciones y apostó por la energía situando en la dirección a su hijo Ricardo. La empresa pasó a llamarse Ruiz de la Torre. Eso sí, la familia siguió y sigue conociéndose como 'los jaboneros', la actividad con la que se inició.
La familia seguía abriendo caminos: en 1912, la fábrica de harinas; su impacto social llevó a Ricardo a la Alcaldía; Santiago fue miembro fundador de la Sociedad Teatro Cervantes; en 1922, una panificadora; en 1929, un taller de venta de vehículos; Santiago fue nombrado alcalde el 26 de febrero de 1930 y ese octubre recibió del Ministerio la Medalla del Trabajo. Falleció a los 87 años.
Aunque los cambios sociales llevaron al cierre de varios negocios, la familia mantuvo el eléctrico, apostó por las nuevas tecnologías y, hoy, por las renovables. «Es bonito recibir un legado de 150 años de trabajo duro, visión de futuro y honradez. Algo hemos hecho bien, sorteando crisis y coyunturas, para llegar hasta aquí y seguir dando empleo y progreso a Arnedo», asiente Jesús Ruiz de la Torre, gerente del grupo y tataranieto de Santiago.
