Arnedillo prohíbe el baño nocturno en las pozas para frenar los usos abusivos

Fue llegar la medianoche del sábado al domingo, desaparecer el estado de alarma y comenzar a llegar personas de otros municipios a las pozas de Arnedillo. Y no exhibiendo un uso responsable de uno de los principales recursos turísticos de la villa del Alto Cidacos. Para frenar los desmanes que se conocieron y puedan darse por las noches, el Ayuntamiento de Arnedillo ha decidido cerrar las pozas al baño desde las 00.00 horas de la medianoche hasta las 6.00 horas.

Al despertar el domingo, las pozas aparecieron con botellas regadas por su perímetro y, en la Vía Verde, un vehículo accidentado. «Que la gente venga a Arnedillo a disfrutar, no a usos irresponsables de las pozas. Vamos a intentar atajar esos abusos con una normativa clara», explica el alcalde, Pedro A. Montalvo.

Con ese objetivo, el pleno de la Corporación arnedillense aprobó por unanimidad en una sesión extraordinaria y de urgencia este lunes ese cierre nocturno de este recurso natural libre.

Tras consultar con la Delegación del Gobierno en La Rioja, la Consejería de Salud y Guardia Civil, el Ayuntamiento de Arnedillo ha anunciado las medidas anti COVID-19 que rigen en este espacio: un aforo máximo de seis personas por poza, con 1,5 metros de separación entre bañistas y la prohibición del baño desde medianoche a las 6 de la mañana todos los días. Estas medidas se unen a las generales como la obligación del uso de traje de baño, la prohibición de introducir vidrio en las pozas, fumar dentro de ellas y establecer un tiempo máximo de inmersión de 15 minutos.