Aguas revueltas en el balneario
La rebaja del 50% del canon de explotación de 200.000 euros anuales solicitada por la gestora al Ayuntamiento gravaleño ha terminado en los tribunales
El proyecto para convertir la comarca del Alhama-Linares en un foco de atracción del turismo termal contaba con dos elementos principales, el balneario de la Albotea de Cervera del Río Alhama y el de Grávalos.
El primero prevé iniciar su andadura este 2023 después años de retraso (se preveía el fin de obras en 2006).
El establecimiento de Grávalos se adelantó, pero desde su apertura ha sufrido diversos contratiempos hasta llegar al momento actual en el que las instalaciones permanecen cerradas y sin previsión de abrir, según indicó la semana pasada Miguel Mirones, presidente de la empresa gestora Relais Termal (grupo Tres Mares). Alega diferencias con el equipo de Gobierno municipal.
El alcalde gravaleño, Emiliano Muñoz, explica que el balneario cerró sus puertas en invierno de 2019, como suele hacer al finalizar la temporada, pero no ha vuelto a ponerse en marcha.
Llegó la pandemia y durante este tiempo de inactividad los problemas con la concesión terminaron en los juzgados.
Según Muñoz, pidió al anterior equipo de Gobierno reducir el 50% el canon de explotación que asciende a unos 200.000 euros al año y se paga mensualmente, pero no hubo respuesta.
«Relais Termal llevó a juicio el asunto y el juez ha fallado a favor del Ayuntamiento, pero la empresa ha recurrido la sentencia», asegura el alcalde de Grávalos.
Asimismo, indica que el Consistorio no tiene potestad para realizar esa rebaja del canon y que habría que contar con el órgano consultivo de la Comunidad Autónoma de La Rioja.
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2010. El Ayuntamiento adjudicó la gestión al grupo Tesal y en 2011 Tres Mares interpuso un recurso que no prosperó.
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2015. Después de dos campañas el recinto cerró. En 2016 hubo denuncias contra la gestora y obras de mejora.
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2017. Reapertura con Relais termal (Tres Mares) al frente, hasta 2019. Reclama una rebaja del canon para continuar.
No es la primera vez que se producen conflictos en la explotación del balneario gravaleño. En diciembre de 2010 el Ayuntamiento adjudicó el contrato al grupo gallego Tesal por treinta años. En enero de 2011 la firma cántabra Tres Mares S. A. (propietaria de la cadena Relais Termal) interpuso un recurso contra la resolución del Consistorio, pero no salió adelante.
Bajo el nombre Hotel Bienestar Balneario de Grávalos inició su andadura en 2014 y continuó una segunda temporada en 2015.
En diciembre de 2015 cerró y a partir de entonces se sucedieron las denuncias de empleados a los que les debían nóminas. El Ayuntamiento también llevó a los tribunales al Hotel Bienestar Balneario de Grávalos que se declaró en concurso de acreedores.
Para poder reabrir el complejo termal, las administraciones regional y local firmaron un acuerdo en 2016 para financiar unas obras de mejora y subsanar deficiencias. Comenzaron en noviembre de ese mismo año.
Además, se licitó un nuevo contrato de gestión que fue para Tres Mares S. A., la única aspirante. La nueva apertura se produjo en primavera de 2017 y, por ahora, ha realizado tres temporadas.
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