Adriana Ugueto, culpable de asesinar a su hija cuando no podía defenderse

Adriana Ugueto es culpable de asesinar con alevosía a su hija, Carolina, de tan solo 5 años, en la habitación 404 del hotel Los Bracos de Logroño entre las 13.30 y las 19 horas del día 26 de enero de 2020. Esa es la conclusión a la que ayer llegaron los nueve miembros del jurado popular que desde el pasado 31 de enero han seguido las sesiones celebradas en el Palacio de Justicia de La Rioja.

En la mañana del pasado viernes, la magistrada que presidió la vista, entregó al jurado el objeto del veredicto, las cuestiones sobre las que debían pronunciarse. En la tarde de ayer, tras una breve deliberación, alcanzaban un veredicto y las partes eran convocadas a las 21 horas en el Palacio de Justicia. Veinte minutos antes de la hora fijada, un vehículo de Policía Nacional introducía a Adriana Ugueto en las entrañas del Palacio de Justicia.

El veredicto aún se hizo esperar. Más de dos horas tardó en comparecer el jurado para hacerlo público. Así, minutos antes de las 23 horas, comenzaba una sesión que se cerró al borde de la medianoche y en la que la portavoz del jurado fue leyendo uno a uno los ocho apartados que constituían el objeto del veredicto. Dentro del jurado no ha habido fisura alguna: todos han alcanzado la unanimidad. Seis de ellos han quedado probados; dos, no probados. Así, el jurado ha concluido que Adriana Ugueto mató a su hija, Carolina, cuando no tenía posibilidad de defenderse. «En el momento de la muerte de la menor, Adriana estaba en el interior de la habitación del hotel Los Bracos sin solicitar ayuda», ha declarado probado el jurado, que también considera que no procede la suspensión de la pena y rechaza la posibilidad de que se solicite el indulto para Adriana Ugueto.

En el interior de la sala, la escenografía fue la habitual a la del resto de sesiones con una Adriana Ugueto inmóvil junto a su letrada y sin exteriorizar reacción alguna tras conocer un veredicto que se podrá convertir en una pena de prisión permanente revisable. Detrás de ella, en la zona del público, el padre de Carolina y una decena de familiares que le acompañaron recibieron la decisión del jurado con alivio. «Se ha hecho justicia y mi niña ya puede descansar», ha dico el padre tras conocer el fallo.

Una vez resuelta la principal duda, la de la culpabilidad de Adriana, la portavoz del jurado popular ha dado lectura al acta del veredicto en la que han justificado el porqué de su decisión. Así, el jurado ha dado por bueno el relato de hechos de las acusaciones y en su lectura ha hecho referencia, entre otros aspectos, a las búsquedas realizadas desde el teléfono móvil, a las cartas, que para los miembros del jurado son «de despedida» y a los vídeos «que son planificados».

Frente a esos hechos que han considerado probados, el jurado, sobre la versión que expuso durante su declaración Adriana Ugueto, tan sólo ha dado credibilidad a que junto a su madre, Olga Febles, y la pequeña Carolina salieron del domicilio familiar de Haro en la mañana del domingo 25 de enero de 2020. A partir de ahí, todas las explicaciones dadas por Adriana «no han resultado creíbles para el jurado por ser contrarias a toda lógica».

En esa misma línea, la portavoz del jurado ha explicado a la sala que de manera unánime consideran que en el momento de los hechos Adriana estaba en sus cabales, que no tenía parcialmente disminuida su conciencia y que «no padecía ningún trastorno que afectara a su voluntad».

Escuchado el veredicto las acusaciones y la defensa solicitaron sus penas. Las primeras mantuvieron su petición de prisión permanenente revisable como autora de un delito de asesinato con alevosía;la defensa de Ugueto ha reclamado a la magistrada que se le condene como autora de un delito de asesinato a la pena de 20 años de prisión.

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