A un solo salto de cabeza hacia el drama
Zambullidas ·
Sin casos en La Rioja este año y muy puntuales en veranos anteriores, el 6% de las lesiones medulares graves se producen por saltos imprudentes al aguaUn simple salto que puede destrozar varias vidas en apenas un segundo. Paraplejias, tetraplejias, lesiones medulares irreversibles... Las zambullidas imprudentes en el agua giran cada verano su dramática factura con una media de entre cinco y seis casos graves cada año en España. La Rioja, sin siniestros de este tipo en este 2022, es una de las regiones con una de las tasas más bajas, aunque ha habido algún caso en el pasado reciente.
«Por suerte no somos una comunidad que tengamos una casuística muy importante de este tipo de lesiones, son casos muy puntuales y este verano de momento no hemos atendido ningún paciente de este tipo, aunque en años anteriores, muy puntuales, sí que hemos tenido algunos. Pero por pocos que sean, es tal la gravedad que no se pueden despreciar, porque son todos evitables y no debería de haber ninguno», explica la doctora María Macías, responsable de la UCI del San Pedro.
La tragedia visita cada año las zonas recreativas de baño españolas. Por ello, cada verano el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (Sermef) y la Federación Nacional Aspaym despliegan en vísperas de la estación estival una campaña de concienciación que en esta edición se bautizó con el sencillo pero contundente eslogan de 'Con cabeza SÍ, De cabeza NO'.

Lesiones medulares
Una de cada 20 lesiones ocurre
por malas zambullidas
Antes de saltar hay que asegurarse de
la profundidad del agua y de los
objetos que pueda haber
en el fondo
Columna
vertebral
Las vértebras
más afectadas
suelen ser las
del cuello
Al golpearse contra el suelo el
cuello se dobla violentamente
hacia adelante y se dañan una o
varias vértebras
GRAVEDAD DE LAS LESIONES
Varían según a que altura de la
columna vertebral se produzca
el impacto
Paraplejia
Lesiones
ocurridas
en las
vértebras
torácicos,
lumbares
o sacros
Tetraplejia
Por lesiones
en la región
cervical
(60% de
los casos)

Lesiones medulares
Una de cada 20 lesiones ocurre por malas zambullidas
Vértebras
cervicales (7)
LA COLUMNA VERTEBRAL
Se compone de 30 huesos (vértebras)
que forman la caja protectora de la
médula espinal.
Están separadas por los discos
intervertebrales que funcionan
como amortiguadores
Torácicas
(12)
Vértebra
Disco
intervertebral
Lumbares
(5)
Sacro
(5 soldadas)
Coxis
(4 soldadas)
Antes de saltar hay
que asegurarse de
la profundidad del
agua y de los objetos
que pueda haber
en el fondo
Columna vertebral
Las vértebras
más afectadas
suelen ser las
del cuello
Al golpearse contra
el suelo el cuello se
dobla violentamente
hacia adelante y se
dañan una o varias
vértebras
GRAVEDAD DE
LAS LESIONES
Tetraplejia
Varían según a
que altura de
la columna
vertebral se
produzca
el impacto
Por lesiones
en la región
cervical
(60% de
los casos)
Paraplejia
Lesiones ocurridas
en los segmentos
torácicos, lumbares
o sacros
Pese a los continuos llamamientos al sentido común, las cifras de cada campaña son desoladoras y las estimaciones cifran que el 6% de las lesiones medulares se deben a zambullidas imprudentes en el agua. De hecho, el centro hospitalario castellano-manchego, hospital público de referencia en España para el tratamiento de la lesión medular, ha atendido solo en los últimos cinco años por lesión medular como consecuencia de una zambullida en el agua a 28 personas –25 hombres y 3 mujeres– de entre 15 y 51 años. Catorce de los siniestros tuvieron como escenario una piscina, nueve ocurrieron en el mar y los cinco restantes, en pantanos y otros entornos acuáticos.
Primeros auxilios
Veintiséis de los veintiocho ingresados sufrieron tetraplejia, un daño muy severo que se traduce en la pérdida del movimiento y la sensibilidad en piernas, brazos y el tronco.
En caso de siniestro hay que llamar al 112 y sacar a la víctima del agua sin mover cuello y columna para no agravar los daños
«El perfil de los accidentados sí está clarísimo, hablamos de un varón de entre 20 y 35 años», aclara la doctora Macías, que recuerda que «los lugares más peligrosos son aquellos en los que la visibilidad del agua no es buena y en los que el nivel del agua varía, que en el caso de La Rioja hablaríamos de pozas y ríos, aunque los riojanos también viajan a la costa y son nuestros pacientes en cuanto pueden ser trasladados aquí o derivados a Toledo».
En caso de un accidente de este tipo, la jefa de la UCI recuerda que «hay que alertar a urgencias a través del teléfono 112 y, aunque la recomendación en un traumatismo medular es no mover al paciente, en este supuesto es obvio que las primeras personas en auxiliar al herido deben saltarse ese paso y salvarle la vida sacándolo del agua, a ser posible entre varios y una vez en la orilla depositarlo en el suelo en una superficie rígida y moviéndolo lo menos posible, sobre todo cuello y columna, para no agravar las posibles lesiones».
«Las lesiones suelen ser en zonas altas y, por ello, más severas»
«Hay una cosa que está clara, las lesiones medulares son una desgracia enorme a nivel personal, familiar y social y, aunque en el caso de los accidentes laborales y de tráfico los factores que influyen son muchísimos e imposibles de controlar, en las zambullidas sí se puede y es no tirarse», advierte la jefa de la UCI del San Pedro.
«Es de los pocos riesgos de lesión medular en el que tienes un control sencillo frente a unas secuelas terribles y es no tirarse y si lo haces hay que controlar muy bien la técnica, estar seguro de que no pasa nadie y haber comprobado que no hay rocas y una profundidad suficiente», insiste la doctora, que destaca que, en este tipo de siniestros «las principales lesiones son la medulares y, dentro de estas suelen ser en zonas altas y, por ello, más severas a nivel funcional, que es lo que nos importa. De hecho, la lesión puede ser tan alta que incluso queden abolidas funciones tan básicas como por ejemplo la de respirar, con lo que el paciente deberá de depender no solo de una silla de ruedas sino de un respirador», alerta María Macías.
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