Casco 'antiguo', casco 'viejo'
MARCELINO IZQUIERDO
Sábado, 28 de enero 2012, 03:45
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Aunque puedan parecer sinónimos, entre 'antiguo' y 'viejo' hay evidentes diferencias de significado. 'Antiguo', según la RAE, significa que «existe desde hace mucho tiempo», mientras que de la palabra viejo lo define, en su quinta acepción, como «deslucido, estropeado por el uso». ¿Y a qué viene, dirán ustedes, esta disquisición semántica? Pues a que el constante desinterés de los sucesivos ayuntamientos logroñeses está haciendo posible que el Casco Antiguo de la capital riojana derive, a no mucho tardar, en Casco Viejo.
Pese a que sólo lleva medio año en el poder, el actual equipo de gobierno tiempo tiene todavía de demostrar que su voluntad política para con el Casco Antiguo es leal. El primer paso dado por Cuca Gamarra, prometiendo salvar del anonimato la torre y el ábside de San Bartolomé, así lo apuntaba. Habrá que tener paciencia, aunque el tiempo pasa y nada se mueve. Por el contrario, la ocurrencia de ceder a la UR la mal llamada Casa de la Inquisición no es buen augurio. Critica el Ayuntamiento el despilfarro del anterior Consistorio en la rehabilitación del edificio, con un sobrecoste de 450.000 euros, y es posible que tenga razón -Dios me libre de meterme en zambras aritméticas-. Pero gracias a tan «derrochadora inversión», uno de los últimos vestigios del patrimonio logroñés no duerme el sueño de los justos como la torre del castillo, los palacetes del Espolón, Marrodán y Rezola, la Casa de las Tetas, el Servicio Doméstico...
¿No supone mayor derroche la cesión de un edificio emblemático a una entidad ajena, en pleno Casco Antiguo/Viejo y que ha costado 1,8 millones, en vez de buscarle un fin turístico o cultural en beneficio de la ciudad?
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