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Mikel Casal
Cómo afectará la nueva Ley de Cambio Climático al ciudadano común y corriente

Cómo afectará la nueva Ley de Cambio Climático al ciudadano común y corriente

Luz más barata, más espacio público o nuevos empleos serán consecuencias del nuevo proyecto de Ley de Cambio Climático

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Lunes, 18 de mayo 2020, 19:39

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Las políticas contra el cambio climático pretenden una transformación radical del modelo de energético, de movilidad y transporte, producción y construcción para conseguir los objetivos de reducción de emisiones de carbono y de controlar el calentamiento del planeta. Los efectos de las medidas que se irán entretejiendo bajo el «paraguas» del proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética los notará el ciudadano de a pie, muy poco a poco. Para cada asunto que afecte lo pedestre no hay un calendario, admiten en el ministerio.

Más espacio

Lo más inmediato y visible concierne al espacio público. En las ciudades se busca incrementar las zonas de bajas emisiones, pero no será Transición Ecológica la que dicte medidas de prohibición. «Iremos de la mano de Bruselas», dicen, a la vez que persiguen la adaptación de infraestructuras para crear más zonas para peatones y bicicletas.

En el litoral, los impactos -actual y futuros-, del cambio climático será una variable que intervendrá en la regulación, planificación y gestión del área costero. Es decir, se evitará el ladrillo al lado del mar.

Menos coches

Continuarán las medidas de incentivo para adquirir coches eléctricos, que durarán hasta que «haya paridad de precios entre un tipo de vehículo y otro». Para ayudar a la implantación del eléctrico se financiará el aumento significativo de los puntos de recarga. También se quiere que los gobiernos regionales refuercen el transporte público.

Luz menos cara

Con «este marco más simple y comprensible», como dice una fuente, se busca una transición energética que, además de incentivar la inversión, tenga «un precio estable a largo plazo por debajo del mercado actual» (sin contar este periodo de escasa demanda por coronavirus).

En otras palabras, el consumidor final debería notar ese cambio en la forma de generar energía en sus recibos de luz. «Un nuevo mecanismo de subastas que permitirá que el consumidor ahorre», donde el precio no lo fije la energía más cara sino un patrón «justo», dice esta fuente.

Nuevos tipos de empleo

Las nuevas generaciones tendrán novedades en las ofertas de trabajo, con la creación de «empleo verde» que quizás equivalga a los puestos de trabajo que se queden en el camino. Por ejemplo, en las industrias dedicadas a la fabricación de las plantas de generación renovables, como las eólicas y solares, o en la generación de biogás, biometano o hidrógeno renovable.

Educación climática

No se creará una asignatura específica de Cambio Climático. «Será transversal en diferentes disciplinas», dice una fuente. Se educará en la idea que la transición ordenada hacia un sistema de bajas emisiones es necesaria por razones de salud y biodiversidad, entre otros factores.

Las alteraciones en la cotidianidad no apreciarán rápido. Una tercera parte de estos cambios se quieren alcanzar para 2030, si se guían por las metas de descarbonización. Es decir, hay una década para apreciar esta transformación. No se notará de la noche a la mañana.

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