Cartas a la directora

Sobre la calle del Horno y los bancos de la Glorieta

Luis Dorado García

Lunes, 27 de octubre 2025, 22:23

Aparece en La Rioja del 26 de octubre, en papel, un artículo titulado 'La calle del horno lanza un SOS al rojo vivo'. No sé ... quién será el tal Rojo Vivo, pero pienso que lo mejor sería que lo lanzasen al Ayuntamiento, que raudo irá a poner remedio a los desmanes.

Publicidad

Ya lo hizo en la Glorieta del doctor Zubía (eminente catedrático) donde, a partir de las quejas de los viandantes, el Excelentísimo corrió a poner pies en pared: ¿Qué los alcohólicos y otras gentes de mal vivir usaban los bancos de la insigne plaza, dando el espectáculo a las personas de bien? Solución: quitamos los bancos y así no se sientan ni las personas de bien ni las de mal vivir, como alcohólicos y escolares. Solucionado, ya no hay alcoholismo en la Glorieta.

¿Ah, que no, que no han dejado de beber y, lo que es peor, de dar guerra? ¿Que ahora se han desplazado a la calle del Horno y a una plazuela pequeña y sin nombre de catedrático (ni ningún otro)? Bueno, pero es una plaza recoleta, esto es, aislada, retirada, poco visible, alejada de vistas biempensantes...

Y bueno, si los vecinos se quejan, que propongan al ínclito Ayuntamiento aplicar la misma solución que a la Glorieta: fuera bancos y, sin quieren beber, que lo hagan de pie.

Y, ya puestos, y si ellos continúan con sus malos vicios, se les puede aconsejar el paseo de Dax, también poco expuesto. Y, si hay quejas, que se quiten los bancos. Y podríamos continuar con la plaza de Amós Salvador, de San Bartolomé, del Mercado, el Espolón, Flamarique, Los Cuentos... y cambiar el eslogan 'Logroño sin ruidos' por 'Logroño sin bancos'. Todo sea por la salud de nuestros alcohólicos. Porque era eso, ¿no?

Este contenido es exclusivo para suscriptores

¡Oferta especial!

Publicidad