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del plural

JOSÉ IGNACIO CENICEROS

Sábado, 1 de abril 2017, 00:44

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Al igual que España, La Rioja necesita estabilidad y certidumbre. Necesita confianza en el futuro. Éste es un tiempo por llegar y hacia el que avanzamos juntos, desde las responsabilidades que cada uno de nosotros tenemos en el presente.

Y en este tiempo presente tengo la enorme responsabilidad de ser el presidente del Gobierno de La Rioja, el presidente de todos los riojanos. Un tiempo en el que el diálogo y el consenso es un arte necesario para garantizar la estabilidad de gobierno, para gestionar mejor los asuntos públicos y para poder presentar los importantes resultados que entre todos estamos logrando.

De estos resultados yo no me arrogo ningún protagonismo, pero sí de situar en primer lugar la cercanía y el talante modulador de una sociedad y de poner de relieve el talento de un equipo de nuestro partido. Un partido que con el esfuerzo de muchos y la contribución de todos ha permanecido unido a lo largo de las dos últimas décadas. Característica que nos ha permitido diseñar y liderar el proyecto de región. La Comunidad que hoy representamos.

Lo dije: «Ni era el candidato elegido por el anterior presidente de mi partido y del Gobierno, ni estaba entre mis ambiciones ser el presidente de La Rioja». Me ilusionaba ser el primer servidor de mi localidad natal. Y lo conseguí. Y a ello tuve que renunciar para dar un paso adelante porque así me lo pidieron como fruto de un gran consenso. Y con todas sus consecuencias, asumí la responsabilidad que mi partido puso en mis manos.

En aquellos días, al mirar de frente a la sociedad riojana el peso de la responsabilidad tocó alguna tecla de mi corazón para sacar fuerzas. Para ser valiente e inconformista, e impulsar una verdadera renovación. Con un nuevo equipo y con un nuevo estilo de liderazgo. 'Zen' escribe algún periodista. Otros expertos lo definen, a diferencia de los llamados personalistas, como un liderazgo transformador y que caracterizan como aquel que es capaz de establecer metas y objetivos compartidos, alentarlos y confiar en las personas elegidas para llevar a cabo los objetivos marcados.

Un camino que tomé para empoderar a grupos e individuos en cuestiones como el hacer político, el vivir diario y la economía; para impulsar cambios beneficiosos para la Comunidad y afrontar las situaciones en que vivían algunos grupos. Un proceso que ya tiene sus resultados, en cumplimiento del programa electoral de mi partido y el programa de Gobierno que presenté, recogiendo el acuerdo de investidura y por la gobernabilidad de La Rioja suscrito con Ciudadanos.

Hoy, me presento a la presidencia de mi partido sin tutelas ni dirigismos. Con mis virtudes y mis defectos. Sin más ropaje que mi propia historia personal y de partido. Con los resultados de la acción de gobierno durante los pasados dieciocho meses, y sabiendo que queda más de la mitad de la legislatura, con retos importantes que afrontar y aspiraciones colectivas por conquistar. Esa es mi ambición y mi tarea, que seguiré realizando con todos y desde la cercanía. Mirándome en el espejo del quehacer diario de todas las riojanas y riojanos.

Para llevarla a cabo necesito de mi partido, del que me siento muy orgulloso. Y es a todo mi partido, por responsabilidad, al que le pido su confianza al presentarme a su presidencia. Lo hago aupado por una gran mayoría de alcaldes y portavoces de La Rioja. Con el aliento de un equipo de gobierno -en el que están presentes tres secretarios generales- que es presente responsable y con un prometedor futuro político por vocación y eficacia. Y cuento con la juventud, porque creo en la juventud.

Su manifestado respaldo me hace decir que nuestra candidatura es insultantemente joven por los valores que representa. Así lo escribo, porque ellos saben que la edad como criterio hacia una persona es hoy insuficiente. Que lo que se hace necesario es saber sumar, tener formulaciones claras y buenas ideas. Que lo que hace falta es saber conjugar en primera persona. del plural. Un nosotros no excluyente, que sume. Un nosotros valiente, que no se amedrente. Un nosotros inconformista, que afronte aquello que se debe mejorar.

Escrito lo anterior, mi propuesta para el PP de La Rioja establece tres grandes ideas: más apertura, más transparencia y más participación. Tres objetivos necesarios para impulsar la verdadera renovación. Una renovación de estilo, de actitudes y de equipos de trabajo para dejar atrás dogmatismos, trampas en el camino y mentiras interesadas. Algo que se ha hecho notorio en este proceso electoral. Hoy la libertad es un derecho fundamental y un principio de nuestro partido. Y la privación de ese derecho o su manipulación, siempre lo combatiré con toda energía.

Quererse a uno mismo y a los próximos, es fácil. Querer al partido es un compromiso con sus principios, con sus valores. Es respeto al compañero en una tarea común. Es saber que "ninguno de nosotros es más importante que todos nosotros juntos". Y éste es principio y manera de conservar el mayor activo que tenemos como organización política: el Gobierno de La Rioja y las Alcaldías de muchos municipios. Es principio y única manera de conquistar las ambiciones futuras que tengamos como partido.

Porque así lo siento, lo dije. Porque así lo siento, lo escribo, y lo seguiré diciendo: mi responsabilidad es la tender puentes para el entendimiento, no la de levantar muros. En todos los órdenes y, cómo no, en este momento crucial de mi partido. Es mi compromiso para poder conjugar siempre en primera persona. del plural. Nosotros, todos.

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