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P. DE LAS HERAS
Sábado, 6 de septiembre 2014, 00:47
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La nueva dirección del PSOE se ha quitado un peso de encima. Carlos Mulas, el que fuera director de la disuelta Fundación Ideas, cesado a raíz del escándalo de Amy Martin, no tomará posesión del escaño que le correspondería una vez se ha hecho efectiva la dimisión como diputado del ex secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba.
Mulas, doctor en Economía por la Universidad de Cambridge y asesor del Fondo Monetario Internacional, hizo pública ayer su renuncia al acta de diputado. «No se trata de una decisión fácil, pero sí muy meditada, en la que he valorado mis preferencias personales así como las implicaciones políticas que tendría mi opción final», justificó. El también profesor universitario, que ya se dio de baja del PSOE en febrero de 2013, asegura que es su deseo desvincularse de manera progresiva de la política. Y sin duda, eso supone un alivio para el equipo de Pedro Sánchez. Mulas se convirtió en una china en el zapato de los socialistas cuando se descubrió que su mujer, Zoe Alameda, había cobrado en torno a 40.000 euros por artículos escritos para la Fundación bajo la falsa identidad de Amy Martin.
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