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El R8 ha visto cómo Audi reforzaba su carácter deportivo en sus dos nuevas versiones. L.R.M.
El R8 gana deportividad y potencia

El R8 gana deportividad y potencia

Audi ha actualizado su modelo deportivo con el lanzamiento de las versiones Coupé y Spider

Domingo, 18 de noviembre 2018, 23:34

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Audi ha actualizado las dos versiones del R8 (Coupé y Spider) con un nuevo diseño exterior y un nuevo motor V10 atmosférico que cuenta con dos variantes de potencia. Ambas versiones se pondrán a la venta a principios de 2019 y llegarán a los concesionarios europeos durante el primer cuatrimestre.

El motor V10 atmosférico del R8 está disponible en dos variantes de potencia. Se trata del motor V10 con idéntica tecnología a la que utilizan los R8 LMS GT3 y R8 LMS GT4 de competición, no en vano, en el lanzamiento del R8 Audi utiliza el eslogan: «Nacido en el circuito, fabricado para la carretera».

«El R8 ocupa una posición única para Audi en todos los aspectos», declara Michael-Julius Renz, Director de Audi Sport GmbH. «Ahora es aún más potente y rápido», añade Oliver Hoffmann, Director Técnico de Audi Sport GmbH: «La competición es parte de nuestro ADN. Con alrededor del 50 por ciento de componentes compartidos con el R8 LMS GT3 y un 60 por ciento con el R8 LMS GT4, ningún otro coche está más próximo a las carreras que el Audi R8», declara Hoffmann.

El motor está equipado con un radiador que controla la temperatura del aceite del motor, que se suministra desde un cárter seco. Este principio de lubricación, procedente de las carreras, permite instalar el motor en una posición muy baja, lo que facilita conseguir un bajo centro de gravedad.

La bomba de aceite funciona en diferentes etapas, lo que garantiza una correcta lubricación incluso con las aceleraciones laterales de alrededor de 1,5 gramos.

Las modificaciones en la suspensión ofrecen mayor estabilidad y precisión en las nuevas versiones del R8 y la asistencia ha sido reajustada tanto en la dirección dinámica opcional como en la servodirección electromecánica.

La versión tope de gama del R8 frena de 100 kilómetros por hora a cero en hasta 1,5 metros menos de distancia que antes y la distancia de detención de 200 a cero kilómetros por hora es hasta 5 metros menor, gracias al control electrónico de estabilidad (ESC).

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