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Llegó, vio, lo cató (casi todo) y arriesgó. El master of wine británico Tim Atkin se atrevió hace ya cinco años a clasificar las bodegas de Rioja por primera vez al estilo bordelés en una región vitícola poco acostumbrada a las diferenciaciones y cada año, después de intensas semanas de trabajo de campo, actualiza una lista en un informe que no deja indiferente a nadie. Atkin publicó ayer en su web su esperado 'Report Rioja 2020' en el que analiza lo acontecido durante el último año en la denominación de origen con una lista de vinos y bodegas que continúa ampliando: 1.228 referencias, una 'pechada' de cata digna de encomio, con 106 vinos (8,3%) con 95 puntos o más, y uno de ellos Sierra Cantabria Mágico, de Viñedos Sierra Cantabria (Marcos Eguren), que alcanza los 99 puntos y el título de mejor vino del año.
Más novedades encontramos en el podio 2020, con Benjamín Romeo (Contador) elegido por Atkin bodeguero del año y su blanco Contador Parcela El Sauco, mejor vino blanco de Rioja. Felipe Nalda, histórico enólogo de la centenaria Bodegas Riojanas (Cenicero) se hace con el título de leyenda de Rioja, mientras que David Sampedro (Bodegas Bhilar) logra el reconocimiento como viticultor del año -mención que recibió el año pasado Juan Carlos Sancha por la recuperación de las garnachas del Alto Najerilla- y que ahora recae en el bodeguero de Elvillar de Álava por su extraordinario trabajo por el cultivo ecológico y biodinámico en su pueblo.
Roberto Vicente, enólogo de bodegas Ysios, recibe el reconocimiento de Atkin como joven del año por su gran trabajo en esta bodega, perteneciente a un gran grupo como Pernod Ricard, pero que ha enfocado el tiro en bodega diseñada por Calatrava hacia la puesta en el mercado de vinos de pequeñas producciones y de viñedo singular.
Winemaker of the year Benjamín Romeo de Bodega Contador
Young winemaker of the year Roberto Vicente de Ysios
Winemaker legend Felipe Nalda de Bodegas Riojanas
Co-operative of the year Bodegas San Cebrín
Grower of the year David Sampedro
Overall red wine of the year 2016 Sierra Cantabria Mágico
Overall white wine of the year 2017 Bodega Contador Colección Benjamín Romeo No. 5 Parcela El Sauco
Overall rosé of the year 2010 López de Heredia Viña Tondonia Rosado Gran Reserva
Overall sweet wine of the year 2017 Ojuel Supurao Dulce
Red wine discovery of the year 2018 Sierra de Toloño La Dula Garnacha de Altura
White wine discovery of the year 2018 Finca Allenda Marure
Rosé discovery of the year 2018 Beronia Alegra de Beronia
Best value red wine of the year 2018 Bodegas y Viñedos Olmaza Viña Olmaza Maceración Carbonica
Best value wine of the year 2017 Marqués de Reinosa Colección Privada Tempranillo Blanco
Best value rosé of the year San Cebrín De Boca en Boca Rosado
Las bodegas clásicas también tienen cabida en el informe de Atkin, con las históricas en lo más alto de la clasificación, mientras que López de Heredia consigue el premio al mejor rosado del año por esa rareza, casi de culto, en que se ha convertido su Viña Tondonia Rosado Gran Reserva. Reconocimiento también para el joven Miguel Martínez, de Bodegas Ojuel (Sojuela), al gran trabajo que ha hecho para la recuperación del vino supurao y que, por segundo año consecutivo, se hace con el galardón a mejor vino dulce de Rioja.
Miguel Ángel de Gregorio, Finca Allende (Briones), no es un descubrimiento a estas alturas, sino un gran hacedor de vinos tintos y uno de los grandes renovadores de Rioja en la última década del siglo pasado pero también un gran elaborador de vinos blancos. Eso sí, se hace un hueco en el podio con el lanzamiento de su nuevo vino Finca Allende Marure como descubrimiento blanco del año. Otra de las novedades del informe del 2020, aunque el año pasado Atkin ya prestó una atención especial a las cooperativas, es el peso que van tomando éstas como productores de vinos a buenos precios. En este sentido, Covila, de Lapuebla, es elegida la mejor cooperativa del año, mientras que el prescriptor reconoce el buen hacer de Tomás Iturriaga en San Cebrín (San Asensio) con el título al mejor rosado del año calidad/precio para su De Boca en Boca. Algo similar ocurre con Marqués de Reinosa, la cooperativa de Autol, a quien Atkin premia su apuesta por la variedad tempranillo blanco con el varietal que elabora Ana Rubio, Marqués de Reinosa Colección Privada, como mejor blanco precio/calidad del año.
El podio lo completa el joven José Gil, con un pedazo de vino joven de maceración carbónica de San Vicente, Viña Olmaza, como tinto de mejor calidad/precio del 2020. En este sentido, el prescriptor británico no es ajeno a lo que está sucediendo en la localidad de la Sonsierra -como vamos contando desde hace tiempo ya en este diario-, con un grupo de jóvenes que está elaborando vinos de extraordinaria calidad y personalidad. Es el caso del propio José Gil, que además de Olmaza elabora una colección de vinos personales con su propio nombre a quien Atkin sitúa ya en el tercer escalón de su pirámide de bodegas de Rioja, o el de Miguel Eguíluz (bodegas Cupani), que entra en el cuarto y, ambos con mención especial en el informe Atkin, mientras que también José Luis Ruiz Bañares (Teodoro Ruiz Monge) pasa al quinto escalón de bodegas con la maceración carbónica como propuesta para todas sus elaboraciones. Atkin recuerda que no son los únicos jóvenes talentos de la región: «Miguel Martínez (Ojuel), Sandra Bravo (Sierra de Toloño y Arturo de Miguel (Artuke) ya ganaron mi premio de jóvenes enólogos en anteriores informes y siguen haciendo cada vez expresiones más destacadas de sus propios terroirs».
En su infome, Atkin pega un repaso concienzudo a lo que ha pasado y está pasando en Rioja en el último año. No es ajeno a la propuesta rupturista de 'Viñedos de Álava', pero lo que es evidente es que el prescriptor cree en la región vitícola en la que, considera todo está por descubrir, y en una zonificación que vaya más allá de las tradicionales áreas administrativas: Rioja Alta, Alavesa y Oriental. Celebra el paso dado hacia los nuevos vinos de viñedo singular y los primeros resultados, pese a las ausencias de algunos de los elaboradores más significativos, y atiza con el 'palo' a las organizaciones mayoritarias del Consejo Regulador que se oponen a modificar la legislación sobre los vinos de pueblo, que exige que la bodega esté ubicada en el mismo municipio para poder elaborarlos cuando el viñedo puede tenerlo una bodega en realidad en otro próximo o incluso colindante. Por último, una reflexión final del prescriptor sobre la tensión existente y el propio funcionamiento mayoritario, por litros y hectáreas de viñedo del Consejo Regulador: «Rioja necesita a sus grandes bodegas, pero también necesita a las medianas y especialmente a las pequeñas de propiedad familiar». «Sin ellas -concluye-, Rioja sería una 'industria' de primera pero una región vinícola de segunda».
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