Logroño

Muebles, ruedas... la basura que no cesa

Que a estas alturas de siglo, aún haya quien considera que puede dejar los restos de los tabiques que ha tirado en su casa en pleno campo no deja de tener su aquel. ¿Que ha habido tiempos peores? Claro, en 2011 eran 1.986 los metros cúbicos esparcidos junto a huertas, caminos y polígonos que tenían que retirarse. ¿Que en 2015 y en 2016 se rondaban los 1.000 metros cúbicos? Pues sí. Pero es que en 2023 las cuentas han dado 686 metros cúbicos en 126 vertederos incontrolados tras unos cuantos años en los que parecía que algo se iba aprendiendo, así que será que, en esta asignatura, los progresos van despacito, despacito, todo pudiendo llamar gratis al «punto limpio» o, con el mismo esfuerzo, dejarlo en Logroño Limpio en La Portalada.

«Dañamos la imagen de la ciudad, contaminamos suelos y dañamos el ecosistema», recuerda el concejal del área, Jesús López, a cuenta de estos vertidos incontrolados.

La labor de retirar residuos de todo tipo, desde colchones a restos de maderas y reformas de viviendas, residuos provenientes de reparación de vehículos, muebles y desechos de construcción y demolición ha sido ardua este 2023. ¿Quién los encuentra o los comunica para que se retiren? La decisión se toma una vez que los detectan, además de los usuarios habituales de las zonas y de los esporádicos caminantes, los inspectores municipales, la misma Policía Local y el servicio de limpieza de la capital. Y, a continuación, la unidad municipal competente acuerda intervenir para su retirada.

Las actuaciones de recogida de la segunda campaña fueron en octubre y noviembre de 2023, en los mencionados 53 puntos repartidos por el extrarradio de Logroño, que correspondieron a las zonas habituales de aparición de vertidos incontrolados, así como los puntos que fueron comunicados por diversos medios a la Dirección General de Medio Ambiente.

¿Qué deparó la última campaña? Respecto a la primera de 2023, se observó un descenso de los puntos de vertido, así como una reducción en la cantidad de residuos de recogida, sin haberse detectado puntos con acumulaciones considerables, apuntaron los técnicos municipales en la memoria que elaboraron al respecto.

¿Los puntos 'clave'? La zona con más puntos de vertido incontrolado agrupados sigue siendo la calle Trascantabria y sus inmediaciones, dada la facilidad de acceso y el poco tránsito de personas a determinadas horas del día, señala la memoria municipal. Los puntos de vertido se han dado sobre todo en esta última intervención, como viene siendo habitual, en la parte Norte de la ciudad (inmediaciones del Monte el Corvo, camino del Plano y camino viejo de Oyón) y polígono industrial de Las Cañas.

Y esto porque la lista de ubicaciones acostumbra a tener unos nombres fijos y, si acaso, en cada una, aparecen otros esporádicos. No suelen fallar los nombres de los caminos de Fuenmayor o de Oyón ni la subida al Monte el Corvo o el entorno del Monte Cantabria. Los alrededores de Varea con distintos enclaves, los polígonos industriales, la pasada de Artalobos... son puntos de interés cada año.

Esta última vez se han vuelto a encontrar neumáticos fuera de uso, recogidos estos en su mayoría en un único punto de vertido en el camino de Pradoviejo.

En los puntos donde se ejecutó algún impedimento físico en campañas anteriores se mantiene reducida la deposición de residuos, aunque siguen apareciendo, mencionan los técnicos municipales en su informe. En las zonas colindantes al río Ebro, en la zona de las huertas de Varea, se ha mantenido la mota ejecutada en campañas anteriores.

En la segunda campaña del año se han localizado dos puntos de vertido con restos de fibrocemento. El localizado en ámbito municipal fue retirado, gestionado y eliminado por una empresa autorizada, mientras que el localizado en una parcela privada, sin impedimento para su acceso, se comunicó a los servicios técnicos de la Unidad de Medio Ambiente para su tramitación con el correspondiente propietario de la finca privada.

Tras la campaña de retirada de vertidos incontrolados de 2021 se colocaron, por parte del parque municipal de servicios, dos bloques de hormigón en los accesos a la antigua gravera de Monte Cantabria, con el fin de evitar el acceso de vehículos a su interior. En esta última campaña de 2023 se ha comprobado que el ubicado en el acceso este ha sido movido y allí se halló uno de los puntos de vertidos localizados, en concreto, en el interior de la zona de caminos.

El concejal del área, Jesús López, indicó que, en estos momentos, estamos supeditados a un seguimiento, casi siempre a posteriori de los sucesos, una vez tenemos constancia de ellos. Y todo a pesar de que la patrulla de la Policía Medioambiental realiza inspecciones periódicas por las áreas susceptibles de que se realicen vertidos ilegales. A partir de ahí, se procede a intentar descubrir algún indicio que posibilite a esta unidad de la Policía que pueda determinar el origen o autor de la infracción.

Y seguidamente el servicio de limpieza viaria procede a la retirada de los vertidos. Por regla general no hay indicios del origen, y aunque los hubiera, es muy difícil demostrar la autoría. Si se consigue conocer el infractor, o se le descubre en el momento en que está cometiendo la infracción, la sanción es inmediata.