Agua en el cielo, fuego en las calles

Las predicciones se cumplieron y la tormenta descargó. Y de qué manera. La tromba de agua obligó a cancelar un puñado de los actos programados durante la tarde del lunes, pero lo que no impidió fue que antes de que el cielo rugiese y después de que las nubes se despejaron el público disfrutase de las actividades que el agua no empapó. Fue el caso del toro de fuego celebrado esta vez en la calle San Matías y que las peñas han recuperado tras años desterrado del programa. El 'vídeo mapping' proyectado sobre la fachada del Ayuntamiento también se 'salvó' del diluvio , así como la energía de todos los que aprovecharon la noche para continuar con unas fiestas que la meteorología es incapaz de arredrar. Ayer fue el turno de la cita con tauromaquia infantil y la demostración que congregó a los más hábiles en completar el cubo de Rubik compitiendo con otro concurso más prosaico: el de beber con porrón a cargo de la Peña La Uva. Por la tarde, Diego Calavia volvió a desplegar sus mejores trucos de magia en las Escuelas Trevijano, demostrando que ni el agua puede arrugar las ganas de diversión.