El Casco Antiguo renace en San Bernabé

El Casco Antiguo de Logroño se engalana estos días con un vistoso mercado de puestos de diversa índole. En la plaza del Mercado, por ejemplo, se encuentran, sobre todo, los artesanos de La Rioja que ofrecen rosquillas, fardelejos, quesos, mermeladas... En la plaza de la Oca hay muchos puestos de complementos y ropa. Detrás de la iglesia de Santiago y cerca de la plaza del Parlamento, distintos puestos de comidas varias. En las plazas Alonso Salazar y del Mercado también hay juegos tradicionales para niños e, incluso, un tiovivo medieval.

Hay suculentos puestos de queserías, embutidos, repostería y golmajería, así como otros sorprendentes de tatuajes que imprimen en la piel tu nombre en árabe desde 3 euros, otros de especias y plantas aromáticas, otros de perfumes y aromas, una jaima para tomar te y hasta uno de productos hechos con corcho. En plena calle Barriocepo, sin toldos pero con sus productos a pie de calle, se muestran los artesanos Cumpanis (panadero) y La Plazuela de Barriocepo (taller de cerámica y guarnicionería), puede que lo más renacentista de todo el mercado y también lo más autóctono.

No obstante, hay puestos de comerciantes y artistas riojanos como el de Naiara Arrieta, ilustradora logroñesa que muestra y vende sus creaciones frente a la UNED. «Aplico mis diseños y dibujos a productos y objetos funcionales», explica Naiara, que en su pequeña pero coqueta tienda, además de láminas originales, ofrece pendientes, bolsos, monederos, gorras, tazas... todo con sus ilustraciones propias. Licenciada en Bellas Artes por la UPV y formada también en Granada, a sus tempranos 30 años traslada los dibujos que realiza en formato editorial a objetos que te puedes llevar a casa y utilizar. «Casi todo está estampado sobre polipiel con diferentes técnicas (digital, sublimación, serigrafía...), voy tanteando todos los medios de estampación y producción», describe la joven artista logroñesa.

El resultado en el mercado es bueno, puesto que Naiara suma ya dos ediciones. «El público de Logroño es la leche y, como además, esto es 'Denominación de Origen Rioja', a la gente le gusta ayudarme y me compra», cuenta. Y lo hace vestida con ropajes renacentistas, intentando, dentro de lo que cabe, sumergirse en la época: «Voy con vaqueros, pero bueno, como detrás del mostrador no se me ve... Pero supongo que también habría ilustradores en el Renacimiento». Los bolsos y las tazas son algunos de sus objetos más vendidos, pero aclara que «al final funciona casi todo, pero lo que más me identifica son las láminas».