La ensuciada escultura de Calvo Sotelo

Al autorizar la apertura de un establecimiento público por parte de los organismos oportunos, se deberían de tener muy en cuenta que dispongan de fácil acceso desde el exterior, reduciendo al máximo la altura del primer escalón a fin de facilitar la entrada a los visitantes.

A pesar de tratarse de una sabrosa fruta llena de sanas propiedades apenas se ve en los mercados el sabroso níspero. Parece acusar negativamente un popular dicho que perjudica su prestigio, que dice así: «Quien nísperos come, y bebe cerveza, espárragos chupa y besa a una vieja, ni come ni bebe ni chupa ni besa».

Parece que desde el Ayuntamiento se quieren adoptar medidas que eviten el consumo de vasos de plástico en bares y cafeterías que se echan a la basura después de utilizados, una medida que se justifica en pro de la higiene y sanidad. Una iniciativa que sugerimos desde esta modesta tribuna es la de recuperar el uso de los porrones, redomas les llama el diccionario, para beber a chorro el vino, zurracapote, sidra, etcétera, sin necesidad de tener contacto bucal con el recipiente. Daría lugar a cantarle a los taberneros aquello de 'Asunción, Asunción, échale media de vino al porrón...'

Las oposiciones que se están celebrando estos días para ingresar en el Parque de Bomberos de Logroño nos recuerdan a un veterano y popular bombero conocido como 'Chaga', que fue jugador del Logroñés, esforzado en su abnegada profesión. Quien, en un incendio que se produjo en Ruavieja, entró a la vivienda por la trasera, que ocupaba un cuarto piso, y descendió por las traseras de la calle Norte, portando el cadáver carbonizado de uno de sus vecinos. Al ser felicitado por las autoridades que presenciaban el suceso, se limitó a justificarlo con una breve frase: «Era mi obligación».

La noticia de que una entidad bancaria propone sustituir el cepillo tradicional recaudatorio en las iglesias por un aparato hábil para utilizar tarjetas de crédito, nos trae el recuerdo de un párroco de nuestra ciudad que hace muchos años publicó una carta en la que pedía a sus fieles que no depositaran en sus cepillos moneda fraccionaria, en aquel entones monedas mal llamadas de cobre de cinco y diez céntimos.

Hoy termina la feria taurina de Santander a la que suelen acudir muchos riojanos donde aprovechan a ir por motivos de paisanaje a visitar La Bodega del Riojano (Río de la Pila, 5) con sus llamativas pinturas en las tapas de sus barricas, o a comer magníficamente en La Bombi (Casimiro Sainz, 15) o a darse una fiesta en el elegante restaurante El Serval (Andrés del Río, 7).