Aquella Albia de Castro... hoy en obras
A pie de calle ·
Recomendable obviar su paso hasta que no se acabe su remodelación
El estado actual del tramo final de la calle Albia de Castro está como para servir de idóneo escenario olímpico para la prueba pedestre de ... obstáculos. Recomendable obviar su paso hasta que no se acabe su remodelación. La contemplación de su estado actual nos trae viejos recuerdos, cuando su situación correspondía a un gran espacio libre que a la gente le dio por llamar Las Chiribitas, justificadamente, pues se trataba de un espacio que en su temporada se cubría con un apretado manto de bellísimas margaritas, más conocidas por estos pagos como chiribitas. Y con este nombre se bautizó el amplio espacio, que lindaba con la vía del ferrocarril que unía Logroño con La Rioja Baja... y más. Hacia el este se encontraba el camino de Lobete y las fincas de la Marrodana y la de la Roja. Por el norte existía una finca de ciruelos, con la que finalizaba el espacio campestre y donde situó Ocón una serrería. El espacio libre al que se le bautizó como Las Chiribitas servía para la instrucción militar de la caballería que llegaba del cuartel de Artillería. Por entonces el fútbol ya había calado en la ciudad, heredando la pasión por el Club Deportivo Logroño.
Apareció un club formado entre el personal de las instalaciones de la Maestranza Aérea que se ganó el salto a Tercera División, hecho que movió a sus dirigentes a buscar un campo donde dirimir sus compromisos. Y encontraron la solución en Las Chiribitas, con espacio suficiente para un campo de fútbol de medidas reglamentarias, otro para baloncesto y vestuarios. Sin terminar, un ventarrón derribó la parte del recinto que daba a la calle Albia de Castro, rehaciéndose después y construyendo allí una tribuna. Como el recinto se hizo con bloques huecos de cemento, los chavales practicaban agujeros en ellos por donde ascendían y se colaban saltando al interior a ver los partidos. El recinto era profusamente utilizado por los equipos de fútbol regional, jugándose hasta tres partidos por la mañana. Eran principales protagonistas Berceo, Balsamaiso, Burle y Tardío, si bien se desbordaba el interés cuando se enfrentaban el Logroñés y el Maestranza. Y no sería justo olvidar a quienes tanto hicieron por la Maestranza y por el deporte (el militar Goicoechea) y por el fútbol regional (Luis Santos).
Muebles Dulce
Interesante la noticia reflejada en estas páginas sobre el proyecto de edificar un hotel en el espacio de la calle Mayor utilizado ahora como parking. Se trata de un espacio singular donde estuvo enclavado un sólido edificio que albergaba la fábrica de muebles del najerino Emilio Dulce, con pesadas máquinas en una primera planta, lo que resultaba insólito en la ciudad. Los muebles fabricados los situaba a la venta en un amplio local en la calle Sagasta. Las traseras de la fábrica que comentamos daban a una calle abandonada adonde se asomaban varios edificios de Portales. La obsoleta calle se iniciaba en La Merced y moría en la plaza Martínez Zaporta, junto al Teatro Moderno, con una verja que impedía el paso.
Lotería del Esteban
La cafetería Esteban (San Millán, 22) repite este año el obsequio a sus clientes y amigos de una participación para el próximo sorteo de la Lotería de Navidad con el llamativo número 00000, que también entra en el bombo. Está impreso en un calendario del 2020. Un fino detalle.
Por la Esperanza
Parecen haber desaparecido las numerosas celebraciones que por estas fechas llenaban nuestras cales de jolgorio. Precisamente los labradores celebran la Virgen de la Esperanza, patrona de la ciudad y merecedora de un tributo acorde con su patrocinio.
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