El desbroce entra en fase de inspección

Muchos y diversos. Solares y terrenos sin edificar que repartidos aquí y allá, cada vez que llega el verano, se convierten en un verdadero quebradero de cabeza para el Ayuntamiento de Logroño. Los vecinos, vigilantes con la llegada del buen tiempo, exigen soluciones, sobre todo si, como sucedía el pasado fin de semana en El Campillo -imagen de la derecha-, se registraba un incendio en uno de ellos, expirado el plazo dado por la Administración local para que los propietarios particulares tomen las medidas preventivas oportunas.

Un bando municipal recordaba este año a todos los dueños de parcelas o solares, independientemente del tipo de suelo en que se ubiquen -urbano, urbanizable delimitado o no delimitado o no urbanizable-, la obligación de proceder al desbroce y limpieza de los mismos a fin de evitar riesgos de incendio con multas de hasta 3.000 euros en caso de desoír los requerimientos municipales.

La fecha límite era el pasado 20 de junio, siendo a partir de ahí cuando los inspectores municipales comprobarán que se encuentran en las condiciones requeridas y, de no ser así, el Ayuntamiento de Logroño acometerá la correspondiente 'limpieza' subsidiaria. El proceso se encuentra actualmente en la fase de comprobación, tarea que entraña sus dificultades.

Así lo explica el concejal de Medio Ambiente, Jesús Ruiz Tutor, quien da cuenta de que las públicas -alrededor de 60- ya se encuentran desbrozadas y que las privadas -superan las 200-, que son las que generalmente dan problemas, pese a estar pendientes de inspección, sí que presentan un adecuado mantenimiento en mayor porcentaje a años anteriores. «Siendo justos hay que decir que los propietarios privados y particulares se han puesto las pilas», reconoce el edil.

La Dirección General de Urbanismo tramitó en el 2013 un total de 133 expedientes de denuncia de estado de abandono y alto riesgo de incendio de solares que lindan con urbanizaciones y zonas donde existen viviendas. Su estado de conservación y mantenimiento, a nadie se le escapa, genera gran preocupación y temor por parte de los vecinos colindantes no sólo por la posibilidad de fuegos, sino también por molestias por la proliferación de insectos, roedores y otras plagas -caso de La Estrella-.

La campaña de mantenimiento de solares y prevención de incendios implica a partir de ahora al servicio de Bomberos. No en vano, será el parque quien determine el riesgo potencial de las parcelas cuyos propietarios han hecho caso omiso al bando municipal.

La normativa al respecto establece que en los casos en que exista alto riesgo de incendio, según informe justificado por los bomberos, se ordenará al propietario el desbroce en un plazo inminente -entre 24 y 48 horas-, «procediendo el Ayuntamiento al mismo en caso de incumplimiento por ejecución subsidiaria y posterior tramitación de expediente sancionador».

De la misma manera, en aquellos solares en que no exista alto riesgo de incendio, «se emitirá resolución de Alcaldía ordenando el desbroce del solar en un breve plazo de 15 días, con incoación de expediente sancionador y apercibimiento de ejecución subsidiaria».

Dos vías de actuación

«Son las dos vías que tenemos para actuar según las parcelas presenten riesgo o no, iniciando el proceso por urgencia/emergencia o haciéndolo de manera ordinaria», explica Ruiz Tutor, quien en cualquier caso precisa que este año la situación de riesgo es menor que en anteriores debido a la meteorología, que ha dado cierta tregua. Las palabras del responsable de Medio Ambiente, no hay que perderlo de vista, llegan después de que, a fecha 20 de mayo -un mes antes de que expirase el plazo voluntario de desbroce y limpieza-, los incendios por maleza se hubiesen cuadruplicado en Logroño y alrededores.

Las altas temperaturas, el tiempo seco y las pelusas acumuladas entonces hacían que las intervenciones de los bomberos se multiplicasen por cuatro pasando de 16 a 60, si bien ya en ese momento el comienzo del tiempo revuelto e inestable que aún se mantiene supuso un alivio.

«Estamos ante un problema sobrevenido por la crisis económica; antes se construía y el movimiento de terrenos era habitual, ahora parte del suelo se ha quedado parado y con constantes cambios de manos que dificultan el proceso», expone Jesús Ruiz Tutor, quien añade entre los obstáculos esas parcelas denominadas «difíciles» que, con 'multipropietarios', ya no es complicado sólo el localizarlos, sino cobrarles la ejecución subsidiaria.

Durante el pasado 2013, la UTE Harinsa Navasfalt S. A. realizó durante los meses de agosto, septiembre, octubre y noviembre trabajos de desbroce y limpieza por un importe de 191.476,67 euros. Una cantidad que ha sido girada a los propietarios de las 84 parcelas sobre las que se actuó de las 95 que no pasaron la inspección (las 11 restantes sí que lo hicieron tras los pertinentes requerimientos municipales). Menos de la mitad si se tiene en cuenta que se comunicó a un total de 203 parcelas privadas censadas.

«Desde Urbanismo se hace toda la labor de requerimiento, inspección, verificación y tramitación de la facturación a los particulares», informa el edil de Medio Ambiente. Las previsiones para el 2014, según Ruz Tutor, son que las ejecuciones subsidiarias desciendan tras comenzar a crearse «cierta cultura de limpieza y mantenimiento sobre todo en el periodo de los meses de verano».

Durante este año, todos los solares municipales -casi 227.000 metros cuadrados de superficie- han sido desbrozados este mes de junio desde dos áreas diferentes de Medio Ambiente: desde Limpieza las más grandes, y desde Parques y Jardines las pequeñas. Además, personal del vivero municipal ha limpiado 54 puntos, que no parcelas, como son rotondas, caminos y otro tipo de espacios comunes. El coste rondará el que supuso el año pasado, que fue de un total de 130.909,9 euros.