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Juan Marín
Viajar en silencio será una norma para los usuarios del transporte público riojano y logroñés

Viajar en silencio será una norma para los usuarios del transporte público riojano y logroñés

Gobierno y Ayuntamiento reclaman a las empresas y administraciones flexibilidad horaria para evitar la congestión en horas punta

Alberto Gil

Logroño

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Martes, 19 de enero 2021, 12:59

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Los autobuses municipales de Logroño y los regionales del transporte metropolitano, interurbano y rural, que son las redes que gestiona el Gobierno de La Rioja, incorporarán a partir de ahora unos carteles con una serie de obligaciones y recomendaciones para los usuarios, entre ellas la de viajar en silencio y sin usar, para conversaciones, el teléfono móvil. Así lo han avanzado esta mañana en una rueda de prensa el director general de Infraestructuras del Gobierno riojano, Vicente Urquía, y el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero. Los carteles recuerdan asimismo la obligatoriedad de subir a los autobuses con mascarilla, de evitar el pago en metálico, de guardar las medidas establecidas de seguridad en embarques y trayectos, de mantener abiertas las ventanas de ventilación, incluso pese al frío invernal, y la prohibición de fumar en las marquesinas de espera.

El silencio en el transporte público es una medida que se ha ido imponiendo en diferentes ciudades españolas a raíz de una recomendación de un grupo de expertos a petición del Ministerio de Ciencia y que ahora quieren aplicar también Logroño y La Rioja en el transporte público. Otra de las medidas obligatorias es el pago con las diferentes modalidades de tarjetas de transporte existentes, para evitar el metálico, lo que ha provocado no pocas quejas de los usuarios, ya que existen incluso barrios logroñeses donde es imposible adquirirlos por problemas de distribución y tampoco se admite la tarjeta de crédito convencional. Preguntado por este problema, Jaime Caballero reconoció que existen carencias en ese sentido, pero aseguró que «se está trabajando en implantar una forma de pago más moderna para evitar los pagos en metálico, así como en nuevos establecimientos para recarga del bonobús».

Petición a las empresas

En todo caso, varias de las medidas con las que se pretende reforzar la seguridad en el transporte público ante la virulencia de la tercera ola de la pandemia recaen en la responsabilidad de los usuarios, más que en los propios medios de las administraciones públicas. Así, otra de las obligaciones que recordarán los carteles es el respeto de las distancias mínimas de seguridad, con una limitación de aforo de los autobuses a todas las plazas con asiento y a un máximo de dos viajeros de pie por cada metro cuadrado. Sin embargo, tanto Urquía como Caballero son conscientes de que existen problemas en las horas punta y, de hecho, confirmaron que ya se han reforzado estos momentos con más servicios e incluso el Ayuntamiento de Logroño tiene previsto mantener en servicio los cuatro autobuses que se van a renovar próximamente para atender la demanda en horas punta.

Insuficiente, en cualquier caso, porque el director general de Infraestructuras, tras conversar con patronal y sindicatos, pidió ayer flexibilidad a las empresas en las entradas y salidas de sus trabajadores para garantizar una mayor seguridad en el transporte público: «Sabemos que no es un tema fácil, porque depende de cada empresa y, si bien somos conscientes que hay algunas que ya son flexibles, sería oportuno que se extendiera esta flexibilidad a todas los centros de trabajo». Urquía aseguró que la administración pública riojana ya está aplicando dicha flexibilidad que especialmente preocupa en las líneas urbanas de Logroño en las horas de entrada y salida de colegios, por lo que hizo también un llamamiento en el mismo sentido a la comunidad educativa.

El director general de Infraestructuras, que confirmó un descenso entre el 30 y el 40% de usuarios en las líneas regionales por la pandemia respecto al año 2019, afirmó que «todos tenemos que poner de nuestra parte para mejorar la seguridad en una situación como la que tenemos actualmente, tanto las administraciones como los ciudadanos», mientras que Jaime Caballero recordó que «el transporte público es seguro, ya que los principales focos de contagio detectados son el ámbito familiar, los centros de trabajo o los entornos sanitarios, pero no el transporte».

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