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Los salarios riojanos siguen sin reponerse de la devaluación sufrida durante la crisis

La pérdida de capacidad de compra supera los seis puntos, dado que el IPC creció el 11,2% entre el 2008 y el 2018 y las retribuciones sólo el 4,7%

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Lunes, 4 de febrero 2019, 20:32

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Los salarios de los trabajadores riojanos han crecido el 4,7% en la última década lo que supone ingresar 73 euros más al mes. Hasta aquí las buenas noticias. Porque este repunte no ha ido parejo al encarecimiento de la vida: entre el tercer trimestre del 2008 y el mismo periodo del 2018, el Índice de Precios al Consumo (IPC) ha subido en la comunidad el 11,2% lo que representa una pérdida de poder adquisitivo para los asalariados de 6,5 puntos. Si se comparase con la evolución de la inflación media nacional (11,6%), que es el dato tradicional de referencia en la negociación colectiva, la merma de la capacidad de compra de los riojanos es aún mayor ya que roza los siete puntos.

Así lo revela el Instituto Nacional de Estadística (INE) en la encuesta que realiza trimestralmente sobre costes salariales brutos mensuales, entendiendo por este concepto todas las percepciones económicas que los trabajadores por cuenta ajena reciben ya sean en efectivo o en especie. Según Estadística, La Rioja es la cuarta comunidad en la que los salarios han acumulado una mayor deterioro del poder adquisitivo tras Cataluña (10,1 puntos), Andalucía (8) y Castilla y León (7,4), y está igualada con Aragón (6,5). En el otro lado de la balanza se sitúa Baleares, autonomía en la que los trabajadores prácticamente ya han recuperado toda la capacidad de compra perdida a lo largo de la crisis dado que sólo restan dos décimas de diferencia.

Más noticias negativas. El salario bruto mensual de los riojanos se sitúa en 1.641 euros al mes, esto es, 201,6 euros menos que la cuantía media del país y 638,5 euros por debajo de lo que cobran los trabajadores vascos, los mejor pagados en España. En la comparativa autonómica, La Rioja ha perdido dos posiciones en el escalafón nacional pasando de ser la undécima región con las retribuciones más bajas del país a la decimotercera al cierre del tercer trimestre del año pasado.

El secretario general de la FER. Eduardo Fernández, reconoce que, «efectivamente, tras una enorme e intensa crisis los salarios han perdido poder adquisitivo», pero recuerda que «las empresas y los autónomos han tenido que ajustarse y reestructurarse de forma muy importante para poder sobrevivir y mantener los puestos de trabajo». «Sin embargo -matiza-, durante los últimos dos o tres años en los que la economía ha vuelto a crecer de forma moderada, los salarios pactados están acompasándose al IPC real».

Para la responsable de Acción Sindical de UGT-Rioja, Isabel Blanco, los datos del INE «dan más fuerza a nuestras reivindicaciones: salario mínimo de mil euros por convenio y derogar la reforma laboral». «Los trabajadores fuimos responsables durante la crisis y ahora es el momento de elevar los salarios, máxime -subraya- cuando la brecha que nos distancia de otras regiones se está ensanchando y vivir bien en La Rioja cada vez se hace más difícil».

El secretario general de CCOO en La Rioja, Jorge Ruano, comparte la necesidad de anular «el marco legal que desencadena salarios bajos, la paralización de convenios y la precarización del empleo», lo que no afecta «ni a directivos ni a mandos intermedios si no a los trabajadores con los sueldos más bajos». «Y de manera dramática -añade- a mujeres y jóvenes, y a sectores de servicios con menor regulación y atomización de las relaciones laborales».

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