La Rioja contará con un protocolo unificado para mejorar la atención de las víctimas de violencia machista
Justicia, Igualdad y el Seris dispondrán de un expediente único en el que confluirán las actuaciones que hayan tenido lugar con cada mujer «para evitar su peregrinaje y revictimización por los distintos recursos»
La Rioja dispondrá de un protocolo de coordinación institucional para mejorar la atención de las víctimas de violencia de género de la región. Así lo ha anunciado este jueves la directora general de Justicia e Interior, Tania Sáez, en una rueda de prensa en la que ha resaltado que contará con la implicación «de todos los ámbitos susceptibles de atender e intervenir en casos de violencia machista», como son las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, Justicia e Interior, la Subdirección General de Igualdad, o el Servicio Riojano de Salud, entre otros.
Sáez, que ha estado acompañada por la subdirectora general de Igualdad, Begoña Marañón, y por la directora de Enfermería del San Pedro, Teresa Sufrate, ha explicado que el principal propósito de este nuevo protocolo es «adaptar el modelo de intervención para que todos los recursos se complementen para su atención integral por unos equipos mutidisciplinares para que puedan recibir la atención social, psicológica, jurídica y laboral, siendo todas estas áreas fundamentales para la recuperación psicosocial».
Para ello, «se trabajará en coordinación con los recursos existentes para que todas las víctimas pasen a ser el punto central de cualquier actuación y para que todos los recursos pivoten en torno a la misma, evitando así su peregrinaje y su victimización por diferentes recursos». Sobre todo, porque con el fin de esta medida es «sumar esfuerzos para mejorar la metodología de trabajo y garantizar que la víctima reciba una mejor atención social, psicológica, sanitaria, policial, jurídica y judicial que redunde en una mejor protección y seguridad que favorezca su proceso de recuperación integral, teniendo en consideración además de la violencia ejercida por la pareja o expareja contra una mujer por el hombre, la violencia sexual, el acoso por razón de sexo, la violencia contra los derecho sexuales y reproductivos de las mujeres y niñas, la trata, la explotación sexual de mujeres y niñas, o la mutilación genital femenina…».
Evitar la revictimización
En este protocolo, que esperan poner en marcha «cuanto antes», «está un equipo multidisciplinar, que emana de la consejería, en donde estamos los tres pilares fundamentales que acompañan a la víctima de violencia de género, a la mujer, a sus hijos y a todas las personas dependientes en el peregrinaje desde la prevención, la protección y la recuperación de la víctima, porque están Justicia, Servicios Sociales y el Seris». En este sentido, ha valorado que «lo que se ha hecho hasta ahora está muy bien, pero convendría mejorarlo pensando en el beneficio de la víctima, porque a veces siente que se le revictimiza porque se le vuelve a preguntar o se le vuelve a tratar de forma diferente dependiendo del servicio al que acuda».
Por todo ello, han configurado un equipo de trabajo compuesto por personal técnico de la dirección general de Justicia, de la Subdirección General de Igualdad, «sobre todo del Centro Asesor de la Mujer, que es donde están los recursos correspondientes de la atención integral a la víctima de violencia de género de la mujer, empezando por una residencia tanto de urgencia como una residencia durante el procedimiento en el que se la acompaña, haga o no la denuncia; y por último, el recurso del trámite al acceso a la vida ordinaria, como son los pisos de tránsito».
No solo eso. Otra de las novedades de este protocolo es la unificación del expediente administrativo. «Necesitamos que haya una unicidad en el software que se utiliza para insertar los datos y que cada una de las unidades administrativas correspondientes pueda acceder a los datos que le corresponden y haya un único expediente con una única mujer y confluyan todas las actuaciones que hayan tenido lugar, desde una posible llamada al 112 hasta cuando encuentra trabajo hasta cuando se le hace un seguimiento para su recuperación en la vida ordinaria». En este punto, ha apuntado que «vimos que el de Justicia se adaptaba muy bien» y que «ya hemos empezado a hacer trámites y pruebas en el Centro Asesor de la Mujer para adaptarlo a nuestras propias necesidades para que aquellas mujeres que no quieran denunciar para cuando lleguen a Justicia tengan conocimiento de todo lo que se les ha tratado».
En el caso del Seris, se establecieron varios objetivos prioritarios. «Priorizar y optimizar la atención a la mujer víctima de violencia de género, tanto la atención urgente como la atención en la prevención; queremos formar y sensibilizar a los profesionales que están relacionados con la atención a las víctimas y todo ello, coordinado con Servicios Sociales, Justicia y Salud», ha resaltado Sufrate mientras ha añadido que «estamos trabajando en este nuevo protocolo para reforzar la coordinación entre todas las partes implicadas, como son sanidad, servicios judiciales y sociales para poner a disposición de las mujeres víctimas de violencia de género los recursos y las herramientas de los que dispone la Administración».