Borrar

RECUERDOS DESDE CENICERO

MANUEL RUIZ HERNÁNDEZ - EL ANÁLISIS

Miércoles, 18 de abril 2018, 00:06

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

L a Universidad de La Rioja viene desarrollando un curso de Enología que dice de verano, en noviembre en Cenicero, en Bodegas Riojanas, y colaboramos en la cata final. Este año 2017 catamos un vino de la casa que dicen «El Lago», de maceración carbónica, que nos colmó de satisfacción y expandió nuestros recuerdos en el tiempo, sobre vinos de Cenicero.

Cuando llegamos a Haro en 1960 a tomar posesión de nuestra plaza de técnico en la Estación Enológica, teníamos cierta prevención sobre cuál sería nuestro ámbito de trabajo. Y nos sorprendió la amabilidad y el buen humor de que hizo gala uno de los compañeros. Se trataba de Alberto Caballero, que por aquellos días llevaba las muestras de vino de su cosecha a analizar y en esas muestras descubrimos el fascinante mundo de la maceración carbónica y las virtudes de la tierra de Cenicero para grandes vinos. Recordamos catar con Alberto y con don Antonio Larrea, el director, tales vinos con deleite y nosotros, desconocedores de La Rioja, preguntamos a don Antonio ¿cuál es el centro de la calidad del vino de Rioja? Y nos respondió: Cenicero. Y durante años seguía diciendo lo mismo.

Alberto había nacido en Logroño el 9 de abril del 1918. Perito agrícola del Estado comenzó a trabajar en la Estación Enológica el 1 de junio del 1949 y se encargaba de los campos de experiencias (El Mazo, Valdesalomón y La Zaballa) y de la bodega experimental, sobre todo en vendimias y crianzas. A él recurrimos, acaso con mucha frecuencia, preguntando datos y sus impresiones sobre suelos, microclimas y peculiaridades de cada cosecha. Dejó la Estación Enológica de Haro en 1967, al ser destinado a la Jefatura Agronómica provincial. En 1975 fue condecorado con la Orden del Mérito Agrícola y tras 36 años de servicio (1949-1985) se jubiló.

Falleció el 21 de abril de 1991 a los 73 años, pero nos dejó un grato recuerdo de carácter riojano, extrovertido y cordial, y nosotros, agradeciendo la gran paciencia que tuvo ante nuestras preguntas técnicas, cuando llegamos al mundo del Rioja con cierto despiste.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios