Borrar
Reunión con usuarios en una de las salas de la Fundación. RODRIGO MERINO

«Yo sé que si no hubiese sido por la Fundación estaría muerto»

Tres usuarios narran su experiencia entre agradecimientos, aunque también con quejas por las normas que impone el mandato judicial

Domingo, 11 de agosto 2024, 08:21

Comenta

No es fácil asumir el destino y menos que con él lleguen imposiciones que no hay más remedio que cumplir. Óscar, Eduardo y Acuvena saben que con la Fundación Riojana de Apoyo a la Discapacidad (Fradis) les ha ido bien. Por ello se deshacen en elogios, pero sin perder la ocasión de quejarse, de tratar de tensar un poquito más la cuerda, a ver si la entidad abre un poquito más la mano en lo económico.

  1. Óscar, 56 años

    «Solo puedo dar gracias, sigo vivo y me ayudan en todo»

Óscar es uno de los veteranos, entró a la Fundación hace 16 años, en 2008, sin ganas de vivir. «Al principio me daban menos dinero para mis gastos, pero ahora confían más en mí. Sé que mi vida ha cambiado para bien. Yo era ludópata, no lo podía evitar, y si no hubiera sido por la tutela yo estaría muerto, me habría suicidado», asegura con un hilo de voz, pero con rotundidad. «Solo les puedo dar las gracias, sigo vivo, me encuentro bien, me ayudan en todo, me dan un dinero que para mí es suficiente», añade.

Óscar tenía familia, pero la relación quedó absolutamente rota. Al final, con mucho esfuerzo y apoyo se han recuperado los lazos y se siente feliz. «Vivo en un piso con un amigo y pagamos 210 euros de alquiler cada uno más gastos aparte, pero ahora también tengo llave de la casa de mi madre y voy a verla», se enorgullece. En Italia tiene una hermana y a su sobrina adolescente, «la niña de mis ojos», a la que ya le tiene preparado un regalo: «Una tarjeta del Bershka».

Pese a sus dificultades y a su discapacidad, Óscar fue profesor de Lengua y hoy, con una pensión de incapacidad, no se rinde y, con «sufrimiento y esfuerzo», cursa Geografía e Historia en la UNED.

  1. Acuvena, 53 años

    «Me quejo, pero sé que tengo una estabilidad económica»

No le importan las fotos pero prefiere elegir otro nombre antes de ofrecer su testimonio. «Pon Acuvena17», avisa. Lleva 14 años en la Fundación, pero le cuesta digerir todavía algunas de las condiciones. Por enésima vez, sin éxito, reclama que le dejen tener una tarjeta monedero. Tuerce el gesto, se queja para, al final, admitir que «la Fundación me ha ayudado a ahorrar. Además de mis otros problemas, soy ludópata, y me quejo, pero sé que tengo una estabilidad económica buena y que, además, he podido recuperar la relación con mi familia. No está nada mal la fundación», admite entre dientes.

  1. Eduardo, 56 años

    «Me costó mucho, pero sin ellos yo estaría en la calle»

Eduardo es de los usuarios noveles. «Llevo poco, en noviembre va a hacer dos años, estoy aquí por una orden judicial, porque tenía problemas ya que llevaba una vida desordenada, debido al juego», arranca su relato.

«Al principio me costó mucho, no es fácil aceptar unas normas que te vienen impuestas. Pero, poco a poco ha ido cambiando. Tengo una pensión de invalidez y voy ahorrando dinero porque aquí no te dan para vicios ni para malgastarlo y esa era mi queja», confiesa, para admitir por último que «si no hubiese sido por la fundación yo estaría en la calle».

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja «Yo sé que si no hubiese sido por la Fundación estaría muerto»

«Yo sé que si no hubiese sido por la Fundación estaría muerto»