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El lío del calendario escolar vuelve año tras año, aunque en una de sus cuestiones más polémicas, la de las vacaciones entre el segundo ... y el tercer trimestre, el Consejo Escolar dictó su opinión unánime en favor de que estas dependan de cómo cayese cada año la Semana Santa. Y como en 2024 esta se celebrará en marzo, Educación asumió la propuesta, regresando al modelo de vacaciones que incluye la semana de Pascua.
La decisión ha sido celebrada por las asociaciones de padres y los sindicatos educativos, mientras que los sectores hotelero y hostelero, después de vivir una Semana Santa de grandes cifras y ambiente en muchos rincones de la región, observan el cambio del calendario con cierta indiferencia.
Después de unos años en los que se impuso el modelo de unas vacaciones de Semana Santa algo más cortas, de lunes Santo a lunes de Pascua, el próximo curso vuelve el modelo más tradicional en La Rioja, que inicia las fiestas en Jueves Santo y suma la siguiente semana, lo que se traduce en un descanso del 26 de marzo al 7 de abril. El cambio implica renunciar a la semana blanca. Además, el curso se enmar- cará entre el 7 de septiembre y el 21 de junio.
Todos los afectados aluden al «criterio pedagógico» y al «consenso» que se ha impuesto en esta decisión que se trasladó desde el Consejo Escolar a la Consejería de Educación. Gustavo Navas, presidente del sindicato ANPE, comenta que «nos gustaría que siempre se siguiese el mismo criterio, que la consejería tenga unas normas claras y no tengamos todos los años el mismo debate». La clave, explica, es «distribuir lo máximo posible los días de descanso a lo largo del curso».
En la misma línea, David Calvo, secretario de educación de STAR, reclama «un reparto de la carga lectiva entre trimestres», situación que se complicaba cuando la Semana Santa se retrasaba hasta abril. Calvo alude a que «en el Consejo se alcanzó un acuerdo sin demasiadas discrepancias. Hay diferentes intereses pero es prioritario enfocarlo desde el punto de vista pedagógico». Pedro Antolín, secretario de la Federación de Enseñanza de CC OO, opina que «el cambio es razonado y correcto», aunque desde su sindicato defienden «que el calendario escolar debería estar más despegado de las festividades religiosas». Por su parte, Alejandro Vesga, de USO, sindicato mayoritario en la red concertada, revela que «entre los trabajadores de nuestros centros realizamos una pequeña encuesta y mayoritariamente prefieren que este descanso incluya la semana de Pascua».
Entre las asociaciones de padres la opinión no difiere. Esteban García, secretario técnico de Fapa-Rioja, valora su conformidad con las fechas del próximo curso y alude a otra cuestión que repiten otras voces del sector educativo: la conciliación. «Da igual que la Semana Santa sea antes o después, las familias no tienen esas vacaciones. Deben crearse ludotecas en los propios colegios pero son un parche, la escuela no debe ser la solución a la conciliación, sino que esta debe llegar desde las empresas», comenta. Por su parte, Carlos Torres, presidente de Concapa, subraya que «siempre hemos defendido que el calendario escolar tiene mucha trascendencia en la conciliación familiar y laboral, y es necesario establecer criterios que permitan a las familias conocerlo con antelación».
Frente a la aprobación general en el ámbito educativo, el sector turístico mira el cambio de calendario con menor interés. «Dependerá más de los días de fiesta que marquen otras comunidades», señala Francisco Martínez Bergés, de la Asociación Hostelería Riojana, si bien reconoce que los clientes locales pueden influir en cierta medida en el balance del sector: «Es una incógnita. Con toda la semana de Pascua de vacaciones faltará gente en los barrios, que se irá fuera, aunque los que se queden pueden disfrutar de más ocio».
Demetrio Domínguez, presidente de la Asociación Riojana de Hoteles, opina que esa variación en las fechas escolares «no creo que influyan a nivel turístico, aunque los riojanos estaremos más en la calle y consumiremos más». Revela además que, durante la semana de Pascua, el número de turistas en el sector hotelero es residual.
Atendiendo al calendario de otras comunidades, la tendencia general es la de contar con unas vacaciones de fin de segundo trimestre similares a las de este curso 2022/23 en La Rioja. Solo en 5 de las 17 regiones –Navarra, País Vasco, Cantabria, Comunidad Valenciana y Baleares– los escolares tuvieron fiesta en la semana de Pascua.
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