«No hay afán recaudatorio. Está publicada su ubicación y los tramos de mayor control»

Además, también niega la mayor. «Los radares no tienen afán recaudatorio. Hacemos campañas para concienciar a los conductores de la importancia de respetar los límites, no tanto por la sanción, sino por las consecuencias que puede tener». Y los datos de mortalidad vienen a dar base estadística a esa máxima: «De los cinco accidentes mortales que se han registrado este año en La Rioja en dos de ellos la causa directa, sí o sí, ha sido la velocidad».

En esa línea, también recuerda que «la ubicación de todos los radares fijos está señalizada y están publicados en la página web de la DGT. También los tramos en los que se intensifican esos controles».

Y sobre la presencia de radares móviles, Zúñiga explica que periódicamente se reúnen los responsables de Tráfico en la región para analizar las carreteras en las que, por motivos de seguridad, es preciso intensificar esos controles de velocidad. «El objetivo es mentalizar y concienciar, pero parece que hasta que no nos tocan el bolsillo no lo hacemos. Tenemos que tener presente que ese exceso nos puede afectar a nosotros y a otros conductores».

Las que, de momento, no sancionan, son las cámaras que registran el uso de cinturón de seguridad... pero lo harán. «Pueden verlo todo. El cinturón, la sillas de retención infantil, el uso del móvil... e incluso la velocidad. La idea es que en un futuro también la controlen», completa.