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El secuestro de un sacerdote puede ser una protesta de los islamistas por la visita

D. MENOR

DACA.

Jueves, 30 de noviembre 2017, 23:52

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El religioso estadounidense Patrick Gaffney, vicerrector de la Universidad de Notre Dame, el único centro de educación superior con que cuenta la Iglesia católica en Bangladés, está muy preocupado por la suerte del sacerdote católico Walter William Rosario, desaparecido el pasado lunes en el distrito de Natore, al oeste del país. «Nos tememos que sea una señal de los islamistas para protestar contra la visita del Papa», dice. En la misma localidad donde vivía este presbítero, que trabajaba como director de un instituto católico, fue asesinado el pasado junio un comerciante cristiano.

El Estado Islámico reivindicó la autoría de aquel delito. La Policía de Bangladés se ha volcado para tratar de encontrar a Rosario, aunque de momento no ha encontrado pistas significativas. «No hemos hallado indicios de un posible accidente de tráfico y ni siquiera hemos localizado su bicicleta», explicó uno de los investigadores al diario local 'New Age'. «Estamos completamente a oscuras de lo que puede haber ocurrido».

Tras investigar la llamada recibida por el hermano del sacerdote desaparecido, en la que los supuestos captores le pedían un rescate de unos 3.000 euros al cambio, los investigadores han descubierto que se hizo a través de internet para no dejar trazas. No se descarta que fuera realizada por alguien que intenta sólo sacar beneficio económico de la situación sin estar detrás del secuestro.

Grupos radicales

«Aquí casi todos los curas nos conocemos. La Policía le ha dicho a algunos compañeros del padre Walter que temen que el responsable de la desaparición sea algún grupo islamista radical activo en esa zona que trata de conseguir publicidad», explica el vicerrector. Rosario tenía previsto participar mañana en el encuentro que mantendrá el Papa con sacerdotes, religiosos, seminaristas y novicias locales en la iglesia del Santo Rosario de Daca. «Pese a este caso o al asesinato de junio no se puede hablar de persecución religiosa a los cristianos en Bangladés.

Son episodios aislados. La mayor parte de los musulmanes son muy respetuosos con nosotros. La convivencia interreligiosa es buena y las leyes garantizan la libertad religiosa. A diferencia de otros países de la zona, aquí hay una tradición histórica de tolerancia a los otros credos. Pese a la pobreza y a los problemas sociales que existen, la gente trata con respeto y dignidad al vecino», añadió Gaffney.

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