Gol. Garrido pega al esférico en presencia de Tato. Suyo fue el segundo gol local.

El Calahorra supera los sustos

Los calagurritanos ganan con autoridad al Calasancio, que aunque tuvo menos ocasiones de gol, incomodó a los locales

LUIS J. AYENSA

Martes, 28 de octubre 2014, 13:08

El Calahorra solventó su compromiso liguero ante el Calasancio con victoria. Tres puntos logrados de manera convincente y mostrando una gran superioridad, ante un adversario, el Calasancio, que dio varios sustos.

Publicidad

La primera parte estuvo teñida por el color rojo de las camisetas locales. Los pupilos de Arévalo tenían el esférico en sus botas y eran quienes imponían el ritmo de juego. Un juego rápido, al toque, buscando las bandas y esperando un agujero en la zaga amarilla, que amurallaba su puerta con dos líneas muy juntas, que basculaban a la perfección y potenciaban las ayudas, lo que blindó las bandas, obligando a los artilleros locales a caer al eje y finalizar de lejos en varias ocasiones. Ya en el minuto 5 Molo avisaba de cabeza en la misma boca de gol.

Chacón se convirtió en una de las piezas más importantes del choque, penetrando por la banda, muy pegado al lateral y asistiendo a sus compañeros, tal y como demostraría antes de que se cumpliese el primer cuarto de hora sirviendo a la perfección a Del Puente, que no llegaba por escasos milímetros para empujar al fondo de la puerta. En el 24, era Omar el que no empujaba el esférico, pero si Del Puente, que marcaba. En el jugada posterior, el Calahorra iba a sacar desde el banderín y Joserra evitaba la sentencia a cabezazo de Guillermo. La única aparición ofensiva visitante dejó helada a La Planilla, ya que en el minuto 44 Merino se adelantaba a sus marcas para empatar el duelo.

El empate no hizo mella en el Calahorra, sino todo lo contrario, sirvió de toque de atención. Iván Garrido tuvo el 2-1 nada más comenzar la segunda mitad, pero Joserra impidió el tanto y cinco minutos después Pipo evitaba el remate a bocajarro del joven delantero rojillo. Garrido se desquitaba de los fallos anteriores y marcaba el gol de la victoria calagurritana de duro disparo.

En los últimos minutos el Calahorra se replegó, consciente de la importancia de los puntos. Víctor tiró de galones y Geru ayudó a su equipo a intentar dar otro susto a la parroquia, pero nunca llegó. Ni Pipo ni el propio Geru dispararon entre los tres palos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

¡Oferta especial!

Publicidad