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Para todo. Ayer hubo tiempo para todo en Las Gaunas. Para protestar al árbitro y para saludar al fotógrafo.
Terapia colectiva en Las Gaunas
ZOOM FOTOGRÁFICO

Terapia colectiva en Las Gaunas

Los aficionados se desahogaron gritando al árbitro después de su 'recital'

E.M. JUAN MARÍN

Lunes, 30 de abril 2018, 00:02

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Cuando el sol brilla en lo alto, con las ganas que hay de marcha después de tantos días de lluvia, las familias hacen sus planes. Y en los de muchos riojanos ayer no entró elegir ir a Las Gaunas a ver el penúltimo partido de la UD Logroñés en casa.

No quiere decir esto que la gente que acudió al Municipal no disfrutara del partido ni animara a los suyos. Ya demostró su fidelidad llenando las gradas de Anduva. Lo malo es que la derrota ante el Mirandés dejó a los blanquirrojos sin apenas opciones y eso se resiente en la grada.

Transcurría el encuentro entre la tranquilidad y algún pequeño sobresalto hasta que Sotillos, primero, y Pere Barceló, después, se encargaron de calentarlo. Primero el futbolista de la UD Logroñés con un golazo de rabia y calidad. Arranca desde atrás el madrileño y acaba una pared con Ñoño con un balón al fondo de la red.

Después llegó la jugada de la expulsión de Santos. Otro revés para el equipo riojano que este año no tiene suerte con este tipo de cosas. La jugada es difícil de decidir. ¿Roja o amarilla? El problema para los blanquirrojos es que esta temporada siempre toca a la contra.

Lo cierto es que todo esto despertó del letargo a los aficionados que durante toda la segunda parte pitaron cada acción que decidía Pere Barceló.

El punto álgido de la protestas llegó cuando el Sporting B logró el segundo gol en una posición antirreglamentaria. La caldera llegó al punto máximo de ebullición. Además, por las protestas, Sergio Rodríguez vio la cartulina roja y tuvo que abandonar el banquillo.

Diferentes cánticos, unos más ofensivos que otros, que entonaron los aficionados que acudieron a Las Gaunas. No sirvió para nada, pero fue una especie de terapia colectiva que permitió a los espectadores un desahogo. Algo es algo en una tarde que acabó con lluvia.

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