Los elementos se alían contra el Haro

En el mejor momento del conjunto de Aitor Calle, el cuadro chacinero marcó el 1-0: Bogdan, tras recibir un centro raso de Luis Lara, abrió el marcador en el minuto 37. Tras el descanso, y después de que Manjón perdonase el empate, Pepe Carmona anotó el 2-0 y dejó prácticamente sentenciada la cita.

El cuadro riojano fue incapaz de generar peligro en el último tramo. La derrota, además, lo deja con solo tres puntos de ventaja sobre el Unionistas que marca la promoción de permanencia.

La escuadra visitante lució orden en la primera media hora. El Guijuelo se presentaba como un adversario complicado: acumula más de 600 minutos sin encajar un gol en su feudo, donde no pierde desde noviembre.

La fortaleza defensiva del equipo de Ángel Sánchez dificultó las acometidas del Haro, que contó con las incorporaciones de Óscar Loza por el carril zurdo como principal fuente de peligro. Txema Pan, con un tiro alto, dio un primer aviso.

El equipo jarrero creció con el paso de los minutos y consiguió hacerse con la batuta del encuentro, pero, cuando más cómodo se encontraba sobre el sintético del Municipal salmantino, recibió un auténtico mazazo en forma de diana en contra. Luis Lara cabalgó por la banda derecha, colgó un centro potente al primer palo y Bogdan, con un bonito remate de tacón, superó a Fermín para colocar el 1-0. Un minuto antes, el meta del conjunto jarrero había intervenido de manera providencial para desviar un mano a mano con Pepe Carmona.

A partir del minuto 33, los visitantes se vinieron abajo y pudieron irse con más de un gol de desventaja al descanso. Javi Barrio despejó en el último instante un centro envenenado y el cuadro charro perdonó un contragolpe de tres jugadores contra uno.

El Haro Deportivo tampoco estuvo acertado ante la meta contraria. Si Ibra había perdonado en la jugada anterior al tanto de Razvan, Manjón tampoco fue capaz de convertir una clarísima ocasión en el minuto 46. El atacante navarro, uno de los refuerzos invernales, envió desviada por centímetros una vaselina sutil sobre Guillermo.

Y quien falla suele pagarlo, y el equipo de Calle no fue menos. En el minuto 49, Pepe Carmona empleó un saque rápido de Jonathan Martín para batir a Fermín y poner el partido muy cuesta arriba para el conjunto harense.

Facu Ballardo, en el minuto 65, estuvo cerca de recortar distancias con un tiro que tocó en un defensa y que Guillermo desvió con problemas. Fue el único acercamiento del Haro en un segundo acto sin pólvora.

Pese a la entrada de Mikel Bueno y Joseba, los visitantes apenas generaron peligro sobre la portería rival. El tiempo corría a favor del Guijuelo, que tiró de veteranía para cerrar el encuentro y enlazar su sexto partido seguido en casa sin perder. La irregularidad sigue pasando factura al cuadro jarrero: reduce su renta con respecto a la zona roja antes de recibir al Izarra, penúltimo clasificado, el próximo fin de semana.

Aitor Calle, entrenador del Haro Deportivo, fue severo en el análisis de la derrota de su equipo este domingo en Guijuelo. El equipo jarrero ofreció una mala cara, sobre todo en la segunda parte. «De los 24 partidos que hemos jugado, este ha sido el peor con diferencia. El equipo no ha estado a su nivel, ni individual ni colectivamente, y el máximo responsable de la derrota soy yo», aseguró el preparador.

El preparador condenó la actitud de sus jugadores: «Hemos sido una caricatura de equipo. El Guijuelo nos ha dado una lección de lo que es esta categoría. Nos vamos con golpes, con el ojo hinchado... Esto es Segunda B. Hemos pecado de inexperiencia, y si le sumamos que no ofrecemos nuestra mejor versión, es aún más complicado», apuntó el míster en rueda de prensa.

«El Guijuelo es un equipo con mucha calidad, y más en su casa, pero si no estás a tu nivel y el rival hace las cosas bien, aprovechando sus opciones, solo te toca sufrirlo y asimilarlo. Ha sido una derrota dura», añadió.

Las ausencias por paperas, que llevaron a solicitar el aplazamiento del choque, supusieron un lastre más, según Aitor Calle, que no quiso buscar justificativos a la derrota: «No nos ha ayudado, pero tampoco es una excusa. Hemos tenido que adaptarnos a las circunstancias. Ahora toca pensar en el próximo encuentro y en que podemos hacerlo muchísimo mejor», sentenció.