Borrar
El dilema ofensivo de la UDL
UD LOGROÑÉS

El dilema ofensivo de la UDL

El conjunto riojano ofrece un fútbol más atascado con dos puntas y un campo más estrecho | Marcos André y Vitoria han coincidido cuatro veces en el once titular y con un juego en el que el centro desde las bandas pierde protagonismo

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Martes, 5 de marzo 2019, 06:51

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Habitualmente, los entrenadores suelen ser quienes ponen el punto de cordura y de equilibrio cuando desde la grada se les acusa de poco atrevimiento o de jugar con un único punta. Cierto es que la UD Logroñés tiene una relación tormentosa con el gol, pero su magnífico rendimiento defensivo le permitía y permite seguir viviendo un fructífero idilio con la clasificación. Y no menos cierto es que cuando este equipo apuesta por juntar a sus dos nueves sobre el césped presenta más problemas en su juego ofensivo.

La UD Logroñés ha evolucionado esta temporada hacia un fútbol que no olvida el del pasado, pero que sí es diferente. Más práctico, más directo e incluso más abierto. En Tudela, el once blanquirrojo regresó al pasado. Volvió a apostar por unir el fútbol de Marcos André y de Ander Vitoria; por jugar con interiores y dejar los carriles a los laterales; por estrechar el campo porque apelaba a un fútbol de segundas jugadas. Y sin embargo, fue superior al adversario cuando movió el cuero a ras de césped, aunque este no invitara a ello, porque impedía que el balón rodará con regularidad, y cuando llegaron los balones desde los laterales.

Marcos André y Ander Vitoria han coincidido en trece partidos. La cifra se ve reducida a la mitad de los jugados por decisiones técnicas, pero también por las diferentes lesiones que han sufrido ambos jugadores a lo largo de la temporada. De esos trece compromisos, en cuatro han sido titulares, aunque la dupla no ha completado los noventa minutos en ninguno de ellos.

En esos cuatro compromisos se han marcado cuatro goles. Se han ganado dos partidos, (Amorebieta, 2-0; Gernika, 2-0); se ha empatado ante el Langreo y se ha perdido en una, este domingo en el Ciudad de Tudela.

Usar dos puntas

Esos números no deben poner el punto de mira únicamente a los dos puntas. Quizá explicar el uso de ambos al mismo tiempo va más allá de su coalición. En Tudela se vio a una UD Logroñés asfixiada en su intento de jugar por el centro y dejar muchos metros libres en las bandas. Demasiado exigencia para Iglesias y Paredes. Ante el Tudelano se vio al mismo centro del campo y a los mismos puntas que ante el Durango. Los mismos. Y aquel primer partido supuso la primera decepción. El equipo se ahogó en su decisión de estrechar el campo y sólo la aparición de hombres rápidos a la carrera (Víctor López y Rubén) cambiaron el ritmo del partido, que no el marcador.

Así, lo más llamativo de la idea es que apostando por un juego diferente y trabajando a lo largo de la semana previa en él, la UD Logroñés fue superior e hizo daño al Tudelano cuando Juan Iglesias explotó su velocidad. Tres acciones de gol, una de ellas con el famoso tanto anulado como final. A Jaime Paredes le costó más romper a la dupla que formaban Delgado y Adán por su carril. A ello ayudó que el juego no era especialmente rápido. La UD Logroñés trabajó para sacar a su adversario de su mentalidad defensiva, aunque no logró que sus dos centrales, Zamorano y Meseguer, sufrieran, como tampoco lo hicieron quince días antes Ekhi y Esnaola en el Stadium Gal de Irún.

Aquí reside otras de las claves, la velocidad del movimiento del balón. A mayor rapidez, mayores problemas para los adversarios, porque este conjunto tiene calidad para darle una circulación de vértigo. Y si llegar a las bandas, mejor porque éstas tienen mucho que decir en el rendimiento de los puntas del equipo.

La UDL cuenta con carriles finalizadores. Tres de los goles ante Amorebieta y Gernika los firma Ñoño; el otro, Marcos André tras una jugada personal y disparo desde fuera del área. Rubén Martínez suma otros tres goles. Tanto uno como otro, Ñoño y Rubén, suelen jugar a pierna cambiada, lo que les conduce a terrenos del interior en busca de ese lanzamiento. Lo que sí pueden lamentar los dos puntas es que apenas disponen de balones desde las bandas.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios