El Calahorra desperdicia su ventaja

Esta situación se ha repetido en otras jornadas, también en la parte final. Ocurrió contra el Atlético Baleares y contra el Castellón. En sendas ocasiones los rojillos ganaban 1-0 y terminaron empatando.

Este domingo fue peor porque ni siquiera lograron un punto después de haberse adelantado en el marcador en dos ocasiones.

Todo ocurrió en la segunda parte porque en la primera apenas hubo ocasiones de peligro y los dos equipos se dedicaron a tantearse.

Hasta el minuto 21 no se produjo el primer disparo entre los tres palos. Esta jugada la protagonizó el conjunto local, pero Anacker atrapó el balón sin complicaciones. El primer saque de equina también fue para el Calahorra, en el minuto 25.

El juego se centraba en la mitad del campo y Limones se dedicaba a calentar y estirar ante la falta de actividad.

Apenas destacaron un par de acciones de ataque local. En una intervinieron López, Santana e Ibarrondo en el minuto 40 y casi al llegar al descanso Álex Arias colgó un balón al área del Cornellá, pero nadie pudo rematar.

Mientras, el conjunto visitante concentraba a sus efectivos en la parte central.

Los primeros cuarenta y cinco minutos resultaron anodinos y no hubo riesgo por parte de los dos equipos.

Al regresar al terreno de juego el Calahorra salió incisivo y en su segunda jugada de ataque Gabarre se quedó solo frente a la portería visitante, pero no acertó a la hora de batir a Anacker que atrapó la pelota por bajo.

Santana tuvo más acierto y adelantó al Calahorra en el minuto 49 a pase de Ibarrondo, sin marcaje, desde dentro del área grande del Cornellá.

Los locales tuvieron momentos de dominio, se notó un cambio evidente y supieron contener al conjunto catalán cuando intentó dar un paso adelante a partir de encajar el gol.

Al Calahorra, que había fallado mucho en los pases durante la primera mitad, ahora le salían hasta los toques de calidad.

La alegría duró poco y cuando mejor cara daban los rojillos, los catalanes empataron con gol de cabeza de Nana en el minuto 61. El campo enmudeció y dejó frío a la afición y a los jugadores.

El Calahorra se repuso y en una jugada posterior a un saque de falta al que habían subido a rematar los dos centrales, Luna se hizo con el balón casi en la línea de fondo de la portería rival y pasó atrás para que Rojas adelantase de nuevo a los locales en el 72.

Barace firmó una jugada que terminó con falta, lanzada por él mismo, pero la barrera la envió a corner. Santana colgó el balón al área en otra ocasión para el Calahorra en la que Gabarre no llegó a alcanzarlo.

A pesar del resultado favorable, el Calahorra siguió incisivo en ataque aunque no pudo ampliar su ventaja.

Luego llegó la debacle, al final del encuentro. En tres minutos el Cornellá metió dos goles (Mamor y Redru) en sendas jugadas sin resistencia, con falta de contundencia rojilla y se llevó los puntos en una Planilla desolada.

«Las derrotas siempre duelen, pero cuando son así, más», comentó el técnico rojillo Carlos Pouso y añadió «en un partido que tienes en el minuto 86 en tu campo ganado, tienen que suceder menos cosas. Nos ha faltado contundencia defensiva y está claro que los nervios atenazan, que esto ocurre, pero cuando se reitera es que no hemos sabido corregir algo. Tengo que reconocer la culpa en lo que me corresponde».

«El Cornellá ha tenido un cien por cien de efectividad, ha chutado tres veces y ha metido las tres», lamentó Pouso.

«El partido ha estado controlado hasta los últimos minutos y hemos perdido poso con los cambios. Los chavales están fastidiados y la solución es trabajar y corregir», señaló.