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Iñaki Williams pelea un balón con el centrocampista del Girona, Alex Granell. EFE
Jornada 15

El Athletic respira en el descuento

Un polémico penalti sobre Muniain permite al conjunto vizcaíno lograr su segunda victoria en Liga

efe

BILBAO

Lunes, 10 de diciembre 2018

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La visita liguera del Girona a San Mamés supone este lunes el arranque con fuego real en el Athletic Club de Gaizka Garitano, que debutó como técnico del equipo en el que formó y llegó a debutar como jugador con un choque copero casi de fogueo en Huesca por el 4-0 de la ida en Bilbao.

Un resultado calcado, 0-4, sirvió al técnico vizcaíno para abrir con brillantez una hoja de servicios en su club y el de toda su familia que le tiene reservado para su segunda encuentro una cita de aúpa: la visita del potente Girona de Eusebio Sacristán.

El equipo catalán está en una racha de ocho partidos sin perder y, liderado por el uruguayo Cristhian Stuani, uno de los grandes goleadores de la temporada, quiere asaltar los puestos europeos.

Para salir victorioso de ese envite, el relevo en el banquillo de La Catedral del argentino Eduardo Berizzo espera un mayor orden y rigor defensivo que ya buscó con el 1-4-4-2 con el que salió a El Alcoraz para frenar la negativa racha de trece partidos sin ganar en liga, la peor de la historia de un equipo bilbaíno ya en posiciones de descenso y con el riesgo de quedarse descolgado en la tabla.

En Huesca, Garitano salió con dos bandas profundas -Markel Susaeta e Iñigo Córdoba- y la pareja de rematadores Raúl García y Aritz Aduriz en ataque. Pero mañana se espera en esas posiciones, por su importancia en el equipo y el descanso de solo tres días tras el partido de Huesca, a Iker Muniain e Iñaki Williams.

Ello conllevaría probablemente un 1-4-2-3-1 y banquillo de inicio para Córdoba y Raúl, como dejó entrever Garitano en el entrenamiento del sábado en Lezama, en el que unió en un mismo equipo a Williams, Susaeta, Muniain y Aduriz.

Aunque de lo que pueda decidir el de Derio en un partido en el que su equipo se la juega está todavía por conocerse.

Lo que sí está claro es que las bajas de los sancionados Yuri Berchiche, Iñigo Martínez y Peru Nolaskoain y el lesionado Mikel Balenziaga le dejan la defensa en cuadro y tendrá que improvisar una línea de cuatro de circunstancias.

Aunque en el lateral izquierdo podría entrar el rumano Cristian Ganea, carrilero contra el Levante en Orriols la última jornada, es probable que sea Oscar de Marcos el que se desplace a esa posición para que Ander Capa juegue en al lateral derecho.

En medio de Capa y De Marcos, las cosas están clarísimas porque Gaizka solo tiene a dos centrales disponibles: Yeray y Unai Núñez.

Como en El Alcoraz jugó Unai Simón, mañana se espera entre palos a Iago Herrerín. Es decir, que mantenga en la portería la jerarquía por la que se decantó Berizzo. Ya avisó hoy que en la meta no tiene dudas porque cuenta con «buenos porteros».

En el doble pivote se perfilan como pareja los de Huesca, Dani García y Beñat Etxebarria, a los que también probó juntos ayer.

Dani García, Capa y Yuri son los tres jugadores que conoce Garitano de su paso por el Eibar, mientras que el Bilbao Athletic, la temporada pasada, tuvo a sus órdenes a Unai Simón y Nolaskoain.

El Girona, por su parte, llega a Bilbao fortalecido y amparado en unos números que también dicen que es el único equipo de Primera que todavía no conoce la derrota como visitante.

La fiabilidad del conjunto catalán lejos de Montilivi es extraordinaria, ya que no pierde a domicilio desde el pasado 8 de abril, cuando la Real Sociedad (5-0) acabó con el sueño europeo que está volviendo a alimentar esta temporada.

El de Eusebio es uno de los seis únicos conjuntos de las cinco grandes ligas continentales que aún no han caído como visitantes, junto al Liverpool, el Paris Saint-Germain, el Borussia Dortmund, la Juventus y el Torino.

El Girona visita San Mamés, donde la campaña pasada perdió por un claro 2-0 en el que fue el primer desplazamiento de su corta historia en Primera División, con la intención de prolongar la que ya es la mejor racha del club en la elite, con hasta ocho jornadas consecutivas sin conocer la derrota.

La plaga de lesiones que ha asolado el vestuario rojiblanco se ha cobrado esta semana dos nuevas víctimas -el arquero marroquí Yassine Bounou y el eléctrico atacante inglés Patrick Roberts-, pero Eusebio, que tampoco podrá contar con los defensas Johan Mojica, Aday Benítez, Carles Planes y Marc Muniesa, afronta el encuentro convencido de las garantías que pueden ofrecer sus sustitutos.

Será un partido especial para Gorka Iraizoz, que celebrará su regreso a San Mamés siendo titular en la Liga por primera vez desde el 15 de octubre del año pasado, y también para Portu, que volverá al once después de cuatro jornadas para acompañar en ataque a un Cristhian Stuani que, con 11 tantos, es el máximo goleador del campeonato junto a Leo Messi.

Un penalti a lo 'panenka' de Aritz Aduriz en el añadido dio este lunes al Athletic un triunfo vital (1-0), una victoria más que merecida y reparadora que además dio el brillo que se había ganado el equipo bilbaíno en el debut en Liga y en San Mamés de Gaizka Garitano.

Aduriz demostró de qué pasta esta hecho y lo que necesario que es para su equipo respondiendo en el momento decisivo, a la hora de tener que transformar desde los once metros el claro penalti sobre Iker Muniain de su 'hermano' Jonas Ramalho.

Desde el punto de penalti fue la única manera que tuvieron Aduriz y el Athletic de batir a un Gorka Iraizoz que, con no menos de media docena de paradas decisivas, había amargado la noche a sus excompañeros.

El equipo bilbaíno acabó con unas estadísticas a su favor que debieron ser demoledoras ya antes del gol en el añadido. Un total de 25 remates y 11 córneres, por 3 y 0 del Girona.

Con la victoria, el Athletic se pone en puntos, que no en puestos todavía, de permanencia, y rompe una racha de trece partidos seguidos de liga sin ganar. La peor racha de su historia. El Girona, por su parte, perdió por primera vez fuera de casa en lo que va de temporada, pero que sigue con ambiciones europeas.

Con San Mamés dispuesto a llevarle en volandas, el Athletic comenzó decidido a asediar el área visitante, donde Aduriz no paró de percutir y percutir en el arranque y el que fuera su compañero Iraizoz de parar y parar.

Hasta tres veces apareció el portero navarro en el primer cuarto de hora para malograr remates claros de gol. El primero parecía que inapelable, un disparo de Williams que despejó a córner.

Las dos siguientes de Iraizoz fueron ya ante Aduriz, primero un cabezazo que mandó a córner rectificando su posición y después en disparo escorado ya cerca del área pequeña que dio en la mano de un defensor antes de lo que despejase el meta de los hoy de amarillo.

Probablemente la acción del jugador del Girona fue involuntaria, pero el balón le fue directamente a la mano y extrañó que el VAR no entrase en una jugada sin rechace por medio, al menos para que la revisase desde el césped Prieto Iglesias.

Precisamente eso fue lo que ocurrió en la primera contra gerundense, que acabó en gol de Stuani después de un resbalón de Núñez en la carrera de Portu, que cedió al uruguayo para que marcase. Prieto Iglesias dio el gol pero el VAR le pidió revisar la jugada y la mano clara de Stuani dejó en nada el tanto, ya con el balón en el círculo central para que el Athletic sacase.

Fue el arranque de los mejores minutos de la primera mitad del Girona, que buscó el 0-1 en disparos de Borja García, bien detenido por Iago Herrerín, Pons y Porro. Estos dos últimos sin opciones.

Recuperó resuello el Athletic y se lanzó de nuevo a por la meta rival, donde ni Williams ni Aduriz ni Núñez ni Raúl García fueron capaces de siquiera rozar un córner cerradísimo que pedía a gritos un ligero empujón para que significase el 1-0.

No llegó en esa jugada y tampoco en otra posterior que significó el cuarto paradón de Iraizoz antes del descanso. En esa ocasión a un disparo cruzado de Córdoba que parecía colarse. Primera parte de presión, intensidad y remates de los locales, infructuosa ante Iraizoz, que fue un muro.

Athletic

Iago Herrerín; Capa, Yeray, Unai Núñez, De Marcos; Williams (Susaeta, m.61), Dani García, Beñat (San José, m.75), Córdoba (Muniain, m.82); Raúl García y Aduriz.

1

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0

Girona

Iraizoz; Pedro Porro, Ramalho, Bernardo, Juanpe, Granell; Pere Pons, Aleix García (Douglas Luiz, m.62); Borja García, Portu (Lozano, m.71); y Stuani (Doumbia, m.89).

  • goles. 1-0, m.91: Aduriz, de penalti.

  • árbitro. Prieto Iglesias (Comité Navarro). Mostró tarjeta amarilla a los locales Beñat (m.55), Núñez (m.74), Capa (m.81), y al visitante Juanpe (m.83).

  • árbitro. VAR: Cordero Vega (Comité Cántabro).

No se paró el meta formado en el Chantrea antes de recalar en Lezama, ya que en la continuación siguió amargando la noche a sus excompañeros. Que no cejaron en su ataque.

Hasta siete veces se acercaron con peligro al área visitante los leones en el primer cuarto de hora de la segunda mitad. Y en las dos más peligrosas apareció de nuevo el navarro.

Primero para cerrar espacios a Capa en su cabalgada hasta el primer palo llegando desde la banda a la línea de fondo, y después para despejar bajo palos el remate que se colaba de Yeray al enésimo córner botado por Beñat.

El Girona, desaparecido y sin apenas salidas de su medio campo destacables, parecía esperar que el Athletic se agotase y, con el paso de los minutos, cediese ante la ansiedad por su necesidad de ganar ante su delicada situación.

Lejos de hacerlo, el Athletic intensificó su dominio y sus ansias de ganar, que se tradujeron en nuevas ocasiones. La más importante un impresionante cabezazo en las nubes de Aduriz que se estrelló en el palo, tras ser rozado por Iraizoz.

Cuando ya parecía que el esfuerzo del Athletic quedaba en casi nada, llegó el penalti de Ramalho a Muniain, el 'panenka' de Aduriz -su primer gol en liga de lo que va de curso- y la felicidad en San Mamés como si de haber ganado una final se hubiese tratado.

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