La racha del Logroño arrasa con el anfitrión

Pero para ello los irundarras tenían que pasar primero por encima de un Ciudad de Logroño que llegaba a este torneo sin presión alguna e inmerso en una fantástica racha positiva de siete victorias consecutivas. De hecho, los locales ya mostraron en el sorteo de las semifinales que los franjivino eran el rival que les hubiera gustado evitar. Yquedó claro finalmente por qué lo decían.

3-1 de salida. Primer aviso para los de Miguel Ángel Velasco. Pero hace falta mucho más para descomponer al actual Logroño. Su nivel se ha elevado hasta colocarle como uno de los equipos más en forma de la Asobal. No le hace falta practicar su mejor juego para mostrarse solvente y efectivo. Igualó el choque con cierta tranquilidad y siguió evolucionando a partir de la defensa y de un Mohamed Aly que encadenó cuatro paradas consecutivas que aprovecharon sus compañeros para colocar a los visitantes por delante por primera vez (4-6).

Tampoco los irundarras se perturbaron mucho ante el cambio de inercia. El partido se equilibró con alternativas y con el duelo protagonizado por los dos porteros: Jakub Jacek Skrzyniarz y Mohamed Aly.

Tanta efectividad en las porterías aumentaba la emoción ya que era difícil que alguno de los contendientes pudiera abrir un margen excesivo, aunque el Bidasoa aprovechó la efervescencia ofensiva de Tito Díaz, con tres goles de diversa factura, para abrir la mayor renta del choque hasta el momento (14-11) justo al límite del descanso. Palomino redujo sobre la bocina el daño.

El de Antequera y Soler acabaron por igualar el choque nada más salir de los vestuarios. Además, los de Miguel Ángel Velasco dejaban claro de inicio la intención de subir la intensidad de su defensa. Este primer aviso le duró poco al Logroño porque el Bidasoa volvió a tomar tres goles de renta. Yhubieran podido ser más si Aly no llega a mostrar su enorme calidad para detener los lanzamientos del cuadro vasco. Ante la flojera en ataque, el egipcio se imponía atrás.

Se las prometían muy felices el Bidasoa y su afición cuando mediado el segundo tiempo contaban con tres goles y daba la sensación de que podían sumar todavía más.

El 20-17 supuso el punto de inflexión definitivo del partido. 1-7 de parcial para los visitantes, con Aly soberbio, la defensa centradísima y Palomino en estado de gracia. La exclusión del malagueño despertó las dudas. Pero el Logroño siguió aferrado a su defensa para aguantar con un hombre menos. Nunca fue la distancia de los franjivino superior a los dos goles, pero la gestión de esta ventaja fue excepcional en los últimos minutos. Tras el 25-25, David Cadarso marcó de penalti; Aly detuvo el ataque local;el logroñés marcó en la siguiente acción y Tuà cerró el pase a la final. A ver quién frena a este Logroño.