El Unibasket señala las abultadas diferencias entre el líder y el colista

Sabía el Unibasket de las dificultades para anotar del rival y ahondó en ellas. Se esmeraron en defensa y cerraron bien el rebote las de Dani Rubio, como es habitual, y consiguieron canastas fáciles para abrir rápidamente la diferencia y llevarla por encima de los diez puntos (6-18) con una actuación coral de todas las jugadoras, el auténtico valor de este equipo. La distancia al final del primer cuarto ya hacía ver que el Bosonit quería evitar problemas en Blanes.

El segundo parcial no hizo más que reafirmar esas sensaciones, con Ceci Aldecoa y Mónica Alonso campando a sus anchas y una Mariela Terrer plena de acierto la renta siguió creciendo. El choque parecía controlado y casi cerrado para las visitantes y apenas habían transcurrido quince minutos.

El parcial de salida del segundo cuarto era demoledor (2-18). Solo quedaba por ver cuánta iba a ser la distancia final entre el primer y el último clasificado porque la diferencia era sideral en juego y en el marcador (14-43).

Todo lo que sucedió después ya poco importaba. El Unibasket había hecho el trabajo con precisión y celeridad y, pese al trabajo de maquillaje local, solo quedaba dejar pasar la obligada segunda mitad para cerrar una nueva exhibición.