El Rioja Vega ve la luz

Porque el Gijón parecía un castillo. Alto, imponente, fuerte y bien armado de músculos y centímetros. Una defensa en apariencia impenetrable pero con un pequeño problema: se han dejado las puertas abiertas. Y si lo más importante se descuida, suceden las catástrofes. El Rioja Vega se aprovechó de ese desorden defensivo total, una anarquía desatada, que permitió a un equipo mucho menos físico hacer puntos en la pintura con una comodidad asombrosa. Primero, Saintel, en el primero cuarto; después, Parrado, antes del descanso. Y aportaciones puntuales ante la falta de ayudas o la concesión de metros bien aprovechada por Noguerol. El Gijón está abajo porque la calidad de sus plantilla se contrarresta con su descontrol. Y si el castillo no tiene cimientos o baja el puente levadizo, la fortaleza se derrumba.

El partido se ha puesto de cara para los riojanos en los primeros minutos, pero sin alcanzar los diez puntos de ventaja (16-8, m. 6). Los asturianos han peleado para limitar la desventaja, pero un triple de Lafuente ha puesto el 25-19 antes del descanso.

El Teslacard ha intentado mantenerse en el partido con unos buenos minutos de Djordjevic al inicio del segundo parcial, pero Saintel, con un matazo, y Parrado han dado inicio a una nueva sangría. En el minuto 15, la renta por fin ha llegado a diez (39-29) y en el descanso, a pesar de unos minutos de desacierto local, el ala-pívot catalán del Clavijo ha sostenido el encuentro (49-38).

El choque parecía camino de resolverse a favor de los riojanos, pero los de Jenaro Díaz no saben vivir sin emociones fuertes. Swift, de escasa movilidad pero abundantes recursos, ha subido a los asturianos a la cresta de la ola con una racha de siete puntos. La diferencia, con un triple de López, se ha sostenido en once puntos (58-47, m. 25) pero ha llegado un apagón que a punto ha estado de echar por la borda todo el trabajo de los locales. Un parcial de 0-9 entre los minutos 27 y 29 han dejado a los gijoneses a tiro de triple (64-61). Los nervios han aparecido en la última jugada, cuando con 66-64, Jordan ha capturado un rebote y, sobre la bocina, ha puesto el 68-64.

La canasta ha puesto en órbita al estadounidense, que ha iniciado el último parcial arrollador. Tres cañonazos de Ty Jordan han abierto otras nuevas brechas en las últimas defensas de los asturianos (75-64, m. 33). Tocaba sufrir y los de Jenaro Díaz lo han hecho ante el Gijón más organizado de todo el partido, que ha acabado en zona y acechando los errores de los riojanos. Afortunadamente, a Jordan le quedaba alguna bala en la recámara, como a Parrado. Sin embargo, hasta el final ha tocado aguantar la respiración. El sino del Rioja Vega. Pero el triunfo final (88-84), en plena pelea desesperada por el 'basket average' de los asturianos, mete a los logroñeses de lleno en la lucha por la fase de ascenso a falta de tres partidos.